R. GARCÍA

El plan de fachadas impulsado desde el gobierno local de Foro Asturias comenzará a aplicarse hoy mismo a pesar de la oposición a las bases de concesión de estas ayudas que expresaron públicamente en los últimos días todos los partidos políticos con representación en el Ayuntamiento. El desacuerdo, que llegó incluso a provocar que el Pleno aprobara una moción unánime de PP, PSOE e IU en contra de las bases de las ayudas, no ha sido impedimento para que la edil responsable de Urbanismo, Lucía García, volviera ayer a defender el proyecto de Foro asegurando que, a pesar de que la mayor parte de los ediles votó en contra del plan, «la competencia para aprobar la modificación de las bases corresponde a la Junta de Gobierno, según las competencias otorgadas por el Pleno, por lo que la Corporación no puede quitar competencias al ejecutivo local». «La voluntad de este equipo de gobierno es destinar todo el dinero que se pueda, con el remanente presupuestario, a este plan», concluyó la edil.

Begoña Fernández, concejala del Partido Socialista en el Ayuntamiento, asegura que su grupo «pedirá responsabilidades a la alcaldesa, Carmen Moriyón, por lo que pueda pasar con estas nuevas bases del plan de fachadas». El PSOE sacó adelante en el Pleno municipal una proposición en la que se pedía que se «flexibilizaran» las bases para la obtención de subvenciones y que se dotara al plan de una partida presupuestaria. En este sentido, los socialistas mantienen, como los constructores, que el nuevo proyecto impulsado por Foro creará «más desempleo en un sector ya de por sí castigado». «La Alcaldesa ha demostrado sentir desprecio por un órgano como el Pleno, que le dio la Alcaldía de la ciudad que no pudo conseguir con los votos de los ciudadanos», recriminó Fernández. Hasta cuatrocientos empleos se podrían perder en la construcción local, tal y como denuncia el PSOE. «Lamentamos que hayan tomado esta decisión, pero que sepan que vamos a pedir explicaciones a los responsables», concluía la edil.

El Partido Popular también se unió ayer a las voces contrarias al nuevo plan de fachadas. «Instamos al equipo de Moriyón a reconsiderar su postura para ayudar a la reactivación del sector de la construcción», declaraba el concejal popular Pablo Fernández. El edil pidió, además, a la Junta de Gobierno «que tenga más cintura política, ya que representa a una minoría numérica en el Ayuntamiento». Los populares se oponen a algunos de los aspectos técnicos recogidos en el nuevo plan de fachadas como, por ejemplo, la edad mínima del edificio o que haga falta la unanimidad de los propietarios para abordar cambios. Además, en las nuevas subvenciones se eliminarán las rehabilitaciones parciales en favor de reformas integrales en donde se exige la eliminación de elementos fuera de ordenación y se impone la mejora del envolvente del inmueble.

Los responsables de empresas de rehabilitación mostraron en su momento su malestar con las nuevas normas aprobadas por el gobierno local. Para los empresarios, este nuevo plan de fachadas «deja fuera el 90 por ciento de las obras». El sector, por su parte, aboga por reformas graduales y por establecer un porcentaje de ayudas creciente. Los constructores consideran que las restricciones impuestas por el equipo de Foro en nada van a ayudar a su sector.