Miriam SUÁREZ

El terreno afectado por el plan especial de las vías ha perdido un 10 por ciento de su valor en los últimos tres años de crisis. Aun así, a enero de 2012, la sociedad de tasación Euroval cifraba en 255 millones de euros el suelo que la sociedad Gijón al Norte comercializará entre El Humedal y Moreda para financiar el soterramiento ferroviario de la ciudad. En este ámbito, de 168.000 metros cuadrados, se podrán construir unos 1.400 pisos.

El dato de Euroval lo aportaba ayer el socialista Pedro Sanjurjo, ex concejal de Urbanismo y consejero fundacional de Gijón al Norte, entidad creada por el Ministerio de Fomento, el Principado y el Ayuntamiento para hacer posible la penetración del ferrocarril en la ciudad. Respondía, así, a las críticas que Foro Asturias Ciudadanos (FAC) ha vertido sobre la operación tanto a nivel autonómico como local: «No hay excusa para decir que esto no tiene futuro y es un desastre».

Según su opinión, todo lo contrario. «Con ese patrimonio de 255 millones, que, por cierto, las entidades bancarias valoran como un activo de calidad, el proyecto es más que viable. No sé a qué están esperando para ponerse a trabajar», instó Sanjurjo, que el próximo domingo concurrirá a las elecciones asturianas como número 11 de la candidatura que encabeza Javier Fernández. «Se trata, según nos dice Asprocon (la patronal gijonesa de la construcción), del ámbito con posibilidades más claras de futuro de toda la ciudad», apostilló su compañera de partido Begoña Fernández, que se mantiene como concejala en el Ayuntamiento gijonés.

La idea de financiar la operación con el aprovechamiento de los solares liberados tras el soterramiento ferroviario fue de Francisco Álvarez-Cascos, ministro de Fomento del PP cuando se creó Gijón al norte y ahora presidente regional en funciones como máximo dirigente de Foro. «Resulta curioso que, con una persona que ha sido parte inicial del proyecto, ni Principado ni Ayuntamiento hayan hecho nada en estos nueve meses sobre el plan de vías», dice Pedro Sanjurjo.

La sociedad Gijón al Norte echó a andar en el año 2002. Álvarez-Cascos puso sobre la mesa la iniciativa de llevar el ferrocarril hasta Viesques mediante un túnel subterráneo. Y el Ayuntamiento, sin hacerle ascos a lo que se conoce como «metrotrén», defendió la necesidad de eliminar la barrera ferroviaria de la ciudad y construir una estación intermodal (para trenes y autobuses). Gijón al Norte compatibiliza ambas pretensiones.

El plan de Cascos fue experimentando variaciones a medida que avanzaban las obras del metrotrén, pero «no por cuestiones políticas, sino técnicas», precisa Sanjurjo, en alusión al cambio de trazado o a la decisión de trasladar a Moreda la estación que el ex ministro preveía en El Humedal. Foro reprocha a los socialistas que hayan aniquilado el proyecto original e insisten en recuperar las ideas de su líder.

«Cuando Fomento perforó El Humedal, estando Cascos todavía en el Ministerio, vieron que no se podían contener las aguas subterráneas. No es que se nos haya puesto a nosotros en la cocorota», quiso dejar claro el ex concejal de Urbanismo. El túnel entre El Humedal y Viesques lleva años perforado y sin utilidad. En cuanto a las obligaciones del Ayuntamiento, «dejamos todo preparado para que la nueva Administración se hiciera cargo del mayor proyecto de reforma interna de Gijón». Entre otras gestiones, corresponde al nuevo gobierno local redactar el estudio de detalle de la futura estación de la ciudad, «algo que todavía no han hecho», recrimina el PSOE.