La peña sportinguista que lleva el nombre del jugador francés Gregory felicitó al central del Sporting por su reciente paternidad. No pudo hacerlo de mejor manera que preparando una fantástica cesta repleta de regalos para su hija recién nacida. El jugador, tan afable de carácter fuera del campo como fiero sobre el césped, agradeció con su mejor sonrisa el gesto de los más de veinte socios de la peña creada en su honor, con los que compartió unos minutos. No fueron muchos, ya que el nuevo entrenador, Javier Clemente, había concentrado a la plantilla para el partido siguiente, en unos momentos en que el equipo se juega la permanencia.

El encargado de entregar el obsequio al francés no fue otro que el presidente de la peña, Javier Rodríguez, al que acompañaron, entre otros, José María Suárez Braña, presidente de la Federación de Peñas Sportinguistas, y Mariano Fernández Prendes, en representación de la directiva sportinguista.

Pero, sin duda, el más feliz de toda la reunión fue Álvaro Espinosa Álvarez, que, con dieciséis meses, no sólo posó con el futbolista, sino que no cesó de vociferar, con su lengua de trapo: «Sí, sí, sí, Gregory», el grito característico de esta peña.