M. CASTRO

El titular del Juzgado de lo Mercantil de Gijón ha declarado en concurso voluntario de acreedores a Oligsa, empresa que gestiona uno de los almacenes de graneles sólidos en la explanada de Aboño. El juez da así de paso la solicitud de la empresa, que ha cifrado su pasivo en 10,18 millones de euros.

El auto judicial que declara el concurso de acreedores fue dictado el pasado miércoles. El juez también ha designado como administrador concursal al abogado gijonés Pedro Prendes Carril, experto en materia concursal (ha escrito varias monografías al respecto, es profesor de esta rama en la Escuela de Práctica Jurídica de Gijón y profesor del programa de doctorado «El derecho concursal» de la Universidad CEU San Pablo de Madrid. El administrador concursal dispondrá de un plazo de dos meses para presentar su informe sobre la situación de Oligsa.

El principal acreedor de Oligsa es la Autoridad Portuaria de Gijón, a la que el operador logístico de graneles le adeuda al menos 4,5 millones de euros. La cantidad restante se adeuda principalmente a entidades financieras y una parte de la misma está avalada por los socios de Oligsa (EBHISA, con un 26%; Suardíaz, con un 26%; Alvargonzález, con un 22%; Globalia Infraestructuras, con un 20%, y Duro Felguera, con un 6%).

Oligsa solicitó el concurso de acreedores el mes pasado. El consejo de administración de la Autoridad Portuaria decidió, el pasado 29 de febrero, incoar un expediente de caducidad de la concesión de los 160.000 m2 que Oligsa explota en la explanada de Aboño. La empresa obtuvo en 2002 una concesión por 30 años, de los que le quedarían aún 20.