Luján PALACIOS

Medio siglo después, Isaac del Rivero se emociona tras «muchos olvidos que ya tengo apartados de mí». El que fuera el primer director del Festival Internacional de Cine de Gijón recibió ayer el cálido homenaje de los organizadores del certamen y del equipo de gobierno municipal, encabezado por la alcaldesa, porque el 50.º aniversario del festival merecía volver la vista atrás y reconocer el trabajo de los pioneros.

Del Rivero, dibujante y cinéfilo, es ya historia viva de la gran cita con el cine en Gijón, desde que naciera en 1963 el Certamen Internacional de Cine y Televisión Infantil. Fue un 21 de julio «cálido, con temperaturas agradables», como recordó Juan José Plans, director a su vez del Festival entre 1988 y 1994. Desde aquel día veraniego y a lo largo de las diecinueve siguientes ediciones, Isaac del Rivero llevó la batuta de un certamen que ha cultivado el gusto cinematográfico de generaciones enteras y que, en sus orígenes, introdujo novedades hasta entonces inexploradas, como los jurados compuestos por niños para juzgar los filmes.

Ahora, con las bodas de oro sobre la mesa, el actual director, Nacho Carballo, ha querido recordar el crecimiento y desarrollo del Festival, que evolucionó desde el público infantil al juvenil y desde ahí al cine independiente y de autor. «El Festival no es de nadie más que de Gijón y de los gijoneses», subrayó Carballo antes de pasar a homenajear a Del Rivero. Y por eso, además de aplaudir al director senior del certamen, este año se festeja el 50.º aniversario con una exposición que recorre el medio siglo de vida de la muestra con fotos, carteles, piezas singulares y objetos para el culto y el recuerdo.

El encargado de poner en marcha la exposición ha sido Juan José Plans, orgulloso ayer hasta la emoción de «poder colaborar con el Festival y por Gijón». De su mano han salido las vitrinas que componen un repaso al que ya es «uno de los festivales de mayor proyección internacional», con un público fiel que llega incluso de fuera de las fronteras nacionales.

La muestra permanece abierta en la segunda planta del Antiguo Instituto hasta el próximo día 12 de diciembre, con un total de 400 fotografías, 50 carteles y un buen puñado de recuerdos entrañables como entradas, cromos, tarjetas y programas de mano añejos. De los primeros años quedan menos testimonios, pero el resultado «es más que suficiente».

En el recorrido que ha diseñado Plans se hilvana la evolución del Festival de Cine de manera paralela al crecimiento y transformación de la ciudad, porque «a Gijón le importa el cine, y al cine también le importa Gijón», subrayó. Así, Plans desgranó algunos momentos para el archivo histórico del certamen, como la primera película que se proyecto en 1963, «Las aventuras de Topo Gigio», o las sucesivas sedes que han ido albergando las proyecciones: Universidad Laboral, Cine María Cristina, Teatro Jovellanos, Teatro Arango...

También hubo un hueco para recordar a Florentino Soria, encargado de inaugurar la primera edición del certamen y por entonces subdirector general de Cinematografía y Teatro. No pudo acudir a la puesta en marcha de la presente edición del Festival, pero envió unas sentidas palabras a los presentes.

El futuro de una cita que no ha dejado de «crecer y evolucionar» aún está por escribir, como indicó Plans, si bien «ésta es la historia que no debemos olvidar», recalcó la alcaldesa, Carmen Moriyón, quien aprovechó para recalcar que la propuesta cultural del Ayuntamiento en lo que va de gestión de Foro «está al servicio de todos los ciudadanos, sin caer en excesos faraónicos». Además, anunció que Cajastur por fin ha hecho llegar su aportación al Festival, una partida de 100.000 euros que estuvo pendiente hasta el pasado martes.

Hoy tendrá lugar la gala de inauguración en el teatro Jovellanos, conducida por la actriz Leticia Dolera y con la entrega del premio «Nacho Martínez» al director de «casting» asturiano Luis San Narciso. Acto seguido se proyectará «Beyond the Hills», del director rumano Cristian Mungiu. Además, también quedó ayer abierta la muestra de Carteles de Cine Checoslovacos (1959-1989), creados por los mejores artistas plásticos del país bajo las limitaciones de la censura. Se abre el telón.