Dos jóvenes vecinos de Gijón de 23 y 24 años de edad se enfrentarán la próxima semana al pago de multas que suman 7.920 euros acusados de fracturar los retrovisores de tres coches que se encontraban aparcados en la confluencia entre las calles Pérez de Ayala y Espronceda, y de robar en un coche fúnebre del que se llevaron documentación y varios objetos. Los hechos que llegarán ahora a los Juzgados gijoneses tuvieron lugar, tal y como relata el fiscal encargado del caso en su escrito de conclusiones provisionales, el 4 de diciembre de 2011.