R. VALLE

El bajo perfil institucional de los representantes del Ministerio de Fomento en el reciente consejo de administración de la sociedad Gijón al Norte se ha convertido para el Grupo municipal Socialista en una muestra más de la desatención de la Administración estatal con el «plan de vías» de la ciudad. Ni el secretario de Estado ni el director general de Ferrocarriles estuvieron presentes en la pasada reunión del consejo de la entidad -integrada por el Grupo Fomento, el Principado de Asturias y el Ayuntamiento de Gijón- que tenía como objetivo fundamental renovar un crédito de 36 millones con las entidades financieras para poder garantizar la supervivencia de Gijón al Norte.

El líder socialista gijonés, Santiago Martínez Argüelles, mostraba ayer públicamente su «inquietud y sorpresa» por el escaso compromiso del Ministerio de Fomento y su «desazón por el papelón que desarrolla el Ayuntamiento de Gijón, encabezado por la forista Carmen Moriyón». A Fomento le achacó, por un lado, que siga sin desafectar los suelos ferroviarios cuya venta desde Gijón al Norte es la vía de financiación de la eliminación de la barrera ferroviaria y, por otro, que pretenda cambiar las condiciones iniciales del pacto entre todas las administraciones para que Gijón al Norte asuma el coste de actuaciones ferroviarias que siempre han correspondido a Fomento. En concreto, la conexión entre el actual punto final del túnel del metrotrén, a la altura del Museo del Ferrocarril, y el actual entramado de vías ferroviarias en la estación de Sanz Crespo.

«El origen de los problemas financieros que se tuvieron que resolver en la reunión del viernes estuvo en la no desafectación de esos terrenos. Una desafectación que sigue sin realizarse cuando hace casi dos años que la playa de vías está levantada. El Ministerio no hace nada en este tema. Y eso no cuesta dinero, es sólo mover papeles», advertía ayer el líder socialista de cara al futuro. Al encarar el segundo de sus reproches a Fomento, Martínez Argüelles dejó claro que «Gijón al Norte ya tiene bastante con la supresión de la barrera ferroviaria para que el Ministerio de Fomento pretenda, además, repercutirle costes que no le corresponden. Fomento pretende reformar el convenio inicial de Gijón al Norte por la vía de los hechos».

Todo ello partiendo del reconocimiento por parte del PSOE de que es imposible asumir el plan de vías sólo con los recursos económicos que se obtengan de la venta de los solares que en otro tiempo ocuparan estaciones y raíles. Los socialistas entienden que se necesita la aportación pública, fundamentalmente de Fomento, comprometida en el acuerdo alcanzado hace diez años. «Esta operación no saldría nunca sin las aportaciones del Ministerio de Fomento, ni siquiera en los tiempos de mayor bonanza y más alta valoración de los solares. Tener como única vía de financiación la venta de solares es tanto como certificar la defunción a plazo de Gijón al Norte y la supresión de la barrera ferroviaria», indicó el portavoz socialista.

Ante este panorama, Martínez Argüelles culpa a Carmen Moriyón y el gobierno de Foro de «sumisión absoluta» ante los dictados del Ministerio de Fomento, le achaca «no pelear por los intereses de Gijón, se gane o se pierda» y, sobre todo, le reprocha «situarnos en un escenario de resignación hasta 2016. Ya asume para penitencia propia que durante su mandato no se va a hacer nada de nada». El líder socialista asegura que «podemos entender que para el Ministerio de Fomento ésta pueda ser una operación más entre todas las que tiene, pero para el Ayuntamiento de Gijón ésta es la operación, la única por la que tiene que mirar y tirar».

Dos mensajes más de Martínez Argüelles a la alcaldesa Moriyón. Uno para recordarle que todo lo realizado en el plan de vías fue gracias a gobiernos socialistas y otro para matizarle que, «ya que le gusta tanto hablar de despilfarros, el monumento al despilfarro que existe en Gijón se llama túnel del metrotrén, con cien millones de euros y paternidad que corresponde en exclusiva a don Francisco Álvarez-Cascos».