Los líderes regionales de los sindicatos ensalzan el ejemplo de la lucha de los trabajadores de Tenneco y su éxito. "Es una puerta de esperanza. Y es un éxito del movimiento sindical y de los trabajadores, a los que tengo que dar la enhorabuena. No hay ninguna batalla que se pueda dar por perdida, sólo se pierden las que no se dan", resalta Justo Rodríguez Braga, secretario general de UGT.

Samuel Fernández, líder de la CSI y trabajador de Tenneco, resalta por su parte el "triunfo del movimiento sindical asambleario" y da las gracias "a toda la ciudadanía por su apoyo solidario". Damián Manzano, secretario general de la federación de Industria de CCOO, asegura que "la lección que tenemos que sacar es que cuando hay una injusticia, como era el cierre de la planta de Tenneco, tenemos todo el derecho del mundo a poder combatirla".

Manzano, al igual que los responsables de los otros sindicatos, resalta el papel determinante que tuvo la Unión Europea. "En cuestiones que nos afectan muy directamente, como las deslocalizaciones, tenemos que incidir en que desde Europa se pongan los mecanismos necesarios para revertir estas situaciones. En España, al contrario, se legisló favoreciéndolas, pero desde la UE se toman decisiones que nos afectan mucho a los asturianos", explica.

El otro valor que destacan del éxito de la plantilla de Tenneco es la cohesión. "La unidad que se consiguió en Tenneco es envidiable. Y nos gustaría que, en todos los ámbitos políticos, sociales y sindicales se diese, porque eso reforzaría al movimiento obrero", resalta José Luis Llera, secretario general de la USO en Asturias. "Planteamos desde el principio que no nos iban a despedir, y gracias a la asamblea, a todos los trabajadores que se mantuvieron unidos, llegamos hasta aquí. Espero que los trabajadores que forman parte de la plataforma de empresas en crisis sigan el mismo camino", manifiesta Samuel Fernández. Rodríguez Braga, por su parte, cree que hubo "una lucha muy conjunta" que "demuestra que la unidad da sus frutos".

Los líderes sindicales animan además a los trabajadores en el proceso de negociación que se abre ahora de cara a la reapertura de la fábrica. "Deben negociar con optimismo y con muchas ganas porque el primer escollo está salvado, que es la reapertura. A partir de ahí, sin la espada de Damocles encima, puede haber una salida", concluye Llera.