Con "una gran sorpresa" recibió el edil forista Alejandro Roces la denuncia de la Sociedad de Bioética (SIBI) advirtiendo de que los impagos del Ayuntamiento comprometen, a día de hoy, su funcionamiento. Según explicó ayer Roces, la SIBI se encuentra en una situación muy delicada al haber perdido a todos sus patronos, excepto el Ayuntamiento de Gijón, y además acumula "una deuda muy importante e insostenible". Conscientes de esa problemática, el equipo de gobierno, con el acuerdo del resto de grupos de la Corporación, planteó a la Sociedad un plan de saneamiento financiero que, al parecer, habría sido rechazado por sus gestores.

El concejal de Hacienda lanzó, no obstante, la advertencia de que lo que el Consistorio no va a aceptar que la SIBI mantenga "una tendencia de gasto desaforado con congresos, viajes y asesorías cobrando millones". Se refería en este último punto Alejandro Roces al contrato de gestión suscrito con una asesoría para llevar los servicios de gestión de la Sociedad de Bioética, por un valor de 85.000 euros al año y que incluía poner a dos personas de este despacho al servicio de la Sociedad. Cuando el Ayuntamiento les planteó un plan de viabilidad financiera les aconsejaron reducir gastos, y entre esos ajustes, precisó Roces, "no tenía sentido tener a dos personas a tiempo completo", más en un momento en que la deuda de la entidad asciende a 60.000 euros. El edil especificó, además, que, tras exponer este asunto a la asesoría, a la que la SIBI le debe 27.000 euros, estos les respondieron que no veían factible la posibilidad de suprimir esos dos puestos de trabajo. "La sorpresa", aseguró Roces, llega cuando tienen conocimiento a través de la prensa, que "han decidido despedir" a esas dos personas. "A partir de ese momento el PSOE entra en danza, y aunque no han dado la cara todavía, parece ser que la asesoría quiere imputarnos los empleados de su despacho al Ayuntamiento, no a la Fundación, cuando somos el único patrono que queda en la SIBI y su explotación resulta plenamente insostenible", subrayó el edil forista.

Según la versión del equipo de gobierno, cuando analizaron la situación económica de la entidad se les planteó doblar la actual subvención municipal de 36.000 "siempre que el Ayuntamiento intervenga en el plan de saneamiento" pero tampoco fue posible completar este procedimiento, aseguró Roces.

El presidente del comité científico de la SIBI, el doctor Marcelo Palacios, manifestaba esta semana a través de las páginas de este diario no haber recibido noticias del Ayuntamiento desde que les enviaron, en junio del año pasado, un documento sobre el estado de necesidades de la Sociedad. Sin embargo, Alejandro Roces se desmarcó de estas declaraciones asegurando que se les ofreció una solución para reestructurar financieramente la SIBI que incluía, junto a la opción de duplicar la subvención, la de reducir crédito hasta 2015 y gestionar el pago de las deudas "como se hizo con el macelo", concluyó Roces.