Dicen algunos docentes gijoneses que la celebración de despedida de los alumnos de 2º curso de Bachillerato en los centros educativos de la ciudad es una fiesta para los alumnos y una celebración de lo más emotiva para los profesores. "Es otra promoción a la que ofreciste lo mejor de tu capacidad profesional", apunta un docente de uno de los Insitutos de la ciudad. "Es otra generación de chicos y chicas y de familias que confiaron en el colegio. En muchos casos se van después de haber pasado 14 años -desde infantil a Bachillerato- con nosotros", apunta una profesora del colegio de las Dominicas. Por una u otra razón la fiesta es muy sentida. Y esa emoción fue la que embargó ayer a alumnos, familias y docentes de seis centros educativos de la ciudad: el Codema, Dominicas, IES El Piles, Doña Jimena, Calderón y Roces. Más de 300 alumnos que recordaron sus vida en las aulas, derrocharon posados para las cámaras y sobre todo se tomaron un respiro antes de afrontar el final del curso.
