El Ayuntamiento de Gijón ha sancionado, por petición de la Policía Nacional, a uno de los manifestantes que a finales de julio fue identificado tras una concentración propalestina en el Náutico. Pese a que esa protesta había sido tranquila, los agentes que promueven la sanción se habían dirigido al manifestante con intención de conocer su identidad para imputarle un atentado a agente de la autoridad cometido días antes en otra concentración mucho más polémica frente al Teatro Jovellanos, contra la actuación de un grupo de baile israelí. La Policía denuncia ahora a este manifestante alegando que en ese proceso de identificación provocó una "alteración del orden público y originó desórdenes en la vía".

La multa, de 90 euros, llega días después de que el juzgado abriera diligencias contra tres de los manifestantes que protagonizaron el altercado frente al Jovellanos, entre los que se encontraban el exlíder de IU en Gijón y exconcejal, Jesús Montes Estrada y su hijo. Entre esos imputados no está el ahora multado, Manuel Fernández, quien mostraba ayer su extrañeza por la comunicación de una multa que piensa recurrir.

"Quisiera ver donde está esa alteración de la seguridad ciudadana. Fue un asalto de comando. Yo tenía una fotocopia del DNI y me llevaron a Comisaría, no hubo más", señalaba Fernández, insistiendo en que durante la actuación de la Policía Nacional "no hice ni un gesto". Otro de los implicados en el, Jesús Montes Estrada, aseguraba ayer que este caso "vuelve a poner de relieve el acuerdo del gobierno municipal de derechas con la política opresora del PP". En este sentido la futura concejala de IU en el Ayuntamiento de Gijón, Cristina Tuya, mantiene que la sanción demuestra la "progresiva criminalización" que vive la protesta ciudadana. "Se busca atemorizar a la población e impedir que se oponga a las políticas injustas y antisociales de la derecha", dice.