¿Un proyecto mixto de formación y empleo, pensado específicamente para jóvenes de entre 16 y 25 años sin trabajo ni titulación de la ESO y con sólo 34 peticiones para Gijón? Ante esa disfunción, los responsables de Comisiones Obreras y el Conseyu de la Mocedá unían ayer sus voces para denunciar que la complejidad técnica para inscribirse en el fichero del plan de garantía juvenil pone en peligro un nuevo programa, el "Joven Ocúpate", que sólo en el ámbito municipal de Gijón movilizaría 450.000 euros en ocho proyectos que beneficiarían a 64 alumnos y daría trabajo a ocho monitores y cuatro maestros. A esa actuación habría que sumar dos proyectos de la Fundación Metal.

"Nuestro miedo es que se acaba perdiendo ese dinero", indicó Marián Artola, responsable del área de Empleo de Comisiones Obreras. La falta de jóvenes parece ser el contratiempo para dar el paso inicial de registrarse como interesado en participar en este tipo de iniciativas, así como los largos plazos para ejecutar la inscripción. Pese a que el "Joven Ocúpate" es un proyecto del Principado, entra dentro de las acciones de garantía juvenil financiadas con fondos europeos y cuya gestión se centraliza en un registro nacional del Servicio de Empleo.

"Nuestro consejo es que los interesados vayan a las oficinas de empleo, a la Agencia Local o a las oficinas del Conseyu de la Mocedá para que alguien les pueda ayudar. El proyecto se pondrá en marcha el 1 de mayo y todo empieza a ser urgente", indicó Artola. "Parece que el proceso está diseñado para fracasar y nosotros lo que queremos es que sea un éxito, y la subvención no se pierda", recalcó el también sindicalista de Comisiones Obreras Rubén Medina.

Javier Suárez Llana, presidente del Conseyu de la Mocedá, respaldó las críticas de CC OO sobre los problemas con este programa para los denominados "ninis" pero adelantó, además, la necesidad de buscar alternativas a otros colectivos que están siendo fuertemente castigados por el desempleo. "Las incitativas se centran en los jóvenes de 16 a 25 años pero donde el paro sube más es en la franja de 25 a 35 años y para ese colectivo no se oferta nada, y eso nos preocupa. Estamos condenados a dos generaciones a un fracaso inducido desde las administraciones públicas", indicó Suárez Llana.