La Policía Local registró entre el 1 de enero de 2014 y el día de ayer tres accidentes de tráfico en la confluencia entre las calles Río de Oro y Eleuterio Quintanilla, la zona en la que el domingo tuvo lugar el atropello mortal que le costó la vida a tres peatones que esperaban para cruzar: Felicita Natividad Peña Rodríguez, de 86 años, su hija Ana María Vega Peña, de 61 y Francisco García Sánchez, de 74 años y sin vinculación con las anteriores. Con esta estadística bajo el brazo, el concejal de Seguridad Ciudadana y Tráfico del Ayuntamiento, Rafael Felgueroso, volvió a defender ayer que la zona no es un "punto negro" de concentración de siniestros. El edil explicó al resto de grupos las causas del suceso en la comisión de Movilidad que se celebró en la Casa Consistorial.
Los agentes municipales concluyeron el martes -gracias al interrogatorio de un testigo al que la familia del acusado había pedido ayuda a través de las páginas de LA NUEVA ESPAÑA-, el atestado en el que se explica el accidente. El informe ya está en poder del juez, que llamará a declarar próximamente tanto al conductor al que se apunta como responsable como a los testigos que se encontraban en primera línea en el momento del suceso.
Las investigaciones de los agentes permiten concluir que el atropello mortal tuvo lugar como consecuencia de una sucesión de infortunios y despistes. El conductor del todoterreno que el martes acudió a la Jefatura de la Policía Local reconoce que cuando estaba esperando a que se abriera el semáforo del cruce en el que tuvieron lugar los hechos vio a lo lejos a un conocido y decidió parar el doble fila, por lo que avanzó unos metros para no dificultar el tráfico. Al percatarse de que este turismo se ponía en marcha el conductor imputado por el triple atropello mortal avanzó también sin darse cuenta de que el semáforo estaba en rojo.
Fue entonces cuando se produjo la colisión con la furgoneta que circulaba por la calle Eleuterio Quintanilla en dirección a la avenida de El Llano. El turismo en el que viajaba el acusado -que se había confundido de calle-, chocó con el vehículo de reparto y lo desplazó varios metros. La furgoneta acabó invadiendo la acera en la que esperaban para cruzar los tres fallecidos. Una de las víctimas del siniestro, el septuagenario Francisco García, le explicó lo que había sucedido al primer policía local que se personó en la zona. La víctima falleció apenas unas horas después al llegar al hospital de Cabueñes. La Policía acusa al conductor del turismo de un delito de lesiones por imprudencia.
