Los Juzgados civiles de la ciudad están cada vez más saturados. Y ya no sólo lo dicen los jueces gijoneses. Ahora estos profesionales tienen encima de la mesa datos que avalan sus quejas por el excesivo trabajo que soportan desde que estallara la crisis. El último informe del Consejo General del Poder Judicial hecho público hace varios días sitúa a Gijón como una de las ciudades con la tasa de litigiosidad más alta de toda España en la jurisdicción civil. En el concejo se tramitan cada año 45 procedimientos de este tipo por cada 1.000 habitantes. Un dato que sólo superan una decena de grandes ciudades españolas como Palma de Mallorca, Vigo, Valladolid, Alicante o Santander. La carga de trabajo aún podría ir a más. Aunque durante todo 2014 se redujo en el concejo un 1,9 por ciento el número total de asuntos que tuvieron que tratar los jueces que trabajan en el Palacio de La Bohemia, los trámites civiles no siguieron esa tendencia sino que se incrementaron en un 20 por ciento.
Las salas sociales -aquellas encargadas de tramitar procedimientos laborales-, las de lo contencioso administrativo o las que resuelven acerca de pensiones alimenticias o herencias son las que más sufren los efectos de la crisis. Aunque aún no existen datos concretos de cada Juzgado -las cifras las publica en su memoria antes del verano el Tribunal Superior de Justicia de Asturias-, la estadística del Consejo refleja que el año pasado se tramitaron en Gijón más de 12.000 asuntos civiles. Cada magistrado tuvo que hacerse cargo a lo largo del año de un millar de asuntos.
El fenómeno no es único de Gijón. Los Juzgados de toda Asturias siguen la misma tendencia. El año pasado los magistrados encargados de temas civiles tuvieron en el Principado un 20 por ciento más de trabajo. Los que entienden de temas penales, por su parte, vieron reducidos los expedientes en casi un cinco por ciento.
Pero ¿cuáles son las causas de este incremento en el ámbito civil? Los abogados y juristas expertos en este tipo de casos señalan a la crisis económica como la responsable última de la carga de trabajo que soportan los Juzgados. Las reclamaciones por el impago de alquileres o de hipotecas, las peticiones de modificación de medidas de divorcios y separaciones o las demandas por presuntas estafas en cláusulas abusivas de préstamos bancarios son algunos de los temas que tienen cada vez más sobre la mesa los magistrados de los Juzgados sociales, mercantiles o de primera instancia.
A pesar de que el trabajo crece parece que en un futuro cercano no se incrementará la plantilla judicial de Gijón. Al menos de momento. La primera vez que se habló de esta posibilidad fue hace ya cuatro años. "A la vista del incremento de la carga de trabajo que se observa en estos Juzgados habrá que valorar en un futuro próximo la creación de un nuevo Juzgado de primera instancia", apuntaban los magistrados del Tribunal Superior de Justicia en el año 2011. Esta posibilidad no llegó a cerrarse si bien es cierto que desde entonces hasta ahora en Gijón ha abierto sus puertas un Juzgado de lo mercantil -el número 3-, que ha servido, al menos en parte, para aliviar la carga de trabajo que soportaban las salas asturianas.
