El nuevo protocolo de control de entrada y salida de barcos de El Musel, denominado "Gijón Tráfico", implantado el pasado día 1, está generando confusión, según indicó ayer la corporación de prácticos a través de un comunicado. La Autoridad Portuaria ha contratado con Sasemar la prestación de este servicio, pagando 250.000 euros anuales por el mismo, mientras que los prácticos señalan que antes lo prestaban ellos mismos de manera gratuita.

"Tras varios días de funcionamiento, ni los consignatarios, ni los capitanes, ni los servicios técnico-náuticos saben cómo actuar", señalan desde la corporación, que indican que una muestra de esa confusión ha quedado reflejada en las grabaciones de las conversaciones del personal de la torre de control de El Musel con las embarcaciones, algo de lo que los prácticos también han comunicado al director de la Autoridad Portuaria. Los prácticos niegan haber faltado al respeto a los capitanes y demás personal que trabaja en la torre por sus críticas.

Insisten en que la fuente de estos problemas es que el mismo protocolo de actuación implantado, contra su criterio, "es confuso y burocrático, además de afectar a la seguridad y ser contrario a la Ley de Puertos y a la Ley de Navegación Marítima".

Los prácticos pidieron ayer que, con independencia de las distintas opiniones de las partes, "se revise el procedimiento y se analicen las razonadas observaciones" que los especialistas han trasladado "por escrito" a las autoridades.

Contacto

Según los prácticos, los capitanes de los buques que llegan a El Musel están quedando perplejos "cuando dos horas antes de llegar a Puerto contactan con Gijón Tráfico para anunciar su llegada. Mensaje que repiten cuando están a una hora de puerto, momento en que Gijón Tráfico les dice que contacten con Prácticos para que se encargue de la maniobra y la obligación de activar al resto de servicios portuarios".