Según los datos registrados por las estaciones de medición de Gijón, durante los episodios de las nubes negras registrados el viernes y el sábado no se superaron los valores límite legales de partículas en el aire ni tampoco los valores recomendados por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Así lo explica el observatorio de calidad del aire "PuntoAire", que aclara que "las partículas son más peligrosas para la salud cuanto más pequeñas". Y añade: "En condiciones de viento fuerte, como estos días, se arrastran a la atmósfera todas ellas, siendo las más grandes las que hacen que la nube sea visible. Pero teniendo en cuenta que los depósitos de mineral están expuestos al viento de forma continua es previsible que en las condiciones de viento habituales las partículas que se suspendan en el aire sean las de diámetro menor, no detectables a la vista".