El grupo de ornitología Mavea sigue insistiendo en su denuncia del estado del estanque del parque de Isabel la Católica y el mantenimiento que recibe por parte del Ayuntamiento. Ayer emitieron un comunicado alertando de "un nuevo vertido de aguas fecales" que, según aseguran, se produjo el pasado viernes. "El olor a alcantarilla era insoportable y su color oscuro se detectaba desde lejos. Personal del Seprona y de la Confederación tomaron muestras del agua para hacer analíticas", cuentan desde Mavea.

El grupo de aficionados a las aves recalca que "desde hace años diversos colectivos y vecinos llevan denunciando el vertido de aguas fecales al canal del Molino Viejo e incluso el Seprona y la Confederación Hidrográfica llegaron a denunciar los hechos". Según el comunicado, "este vertido procede del aliviadero de unos edificios cercanos al canal del Molino Viejo, y de ahí pasa a los estanques del parque".

Para Mavea resulta "increíble que esto ocurra en el siglo XXI dentro de una gran ciudad, junto a un Parador Nacional y contaminando un espacio de valor natural" y, por ello, reclaman varias medidas.

"El grupu d'ornitoloxía Mavea solicita que se hagan públicos los resultados de las analíticas, se solucione el problema de ese aliviadero y se depuren las responsabilidades correspondientes", explican en su comunicado.

Este colectivo ha intensificado en los últimos días su denuncia de los cuidados que recibe el estanque de la emblemática zona verde de Gijón y han alertado del riesgo de un brote de botulismo que ponga en peligro la vida de las aves que usan el estanque. "Estos vertidos fecales son otro factor más que puede contribuir a la presencia de botulismo", aseguran. Sin embargo, desde el Ayuntamiento defienden su gestión de la zona acuática del parque de Isabel la Católica.