Líneas que bailan al son de la acuarela. Pinceladas del restaurador gijonés Javier Fuertes se dibujan en la sala de exposiciones de la Fundación Alvaronzález que reúne cinco tallas de madera, cuatro cuadernos de apuntes al natural y más de veinte pinturas del artista. Fuertes, actualmente profesor de dibujo en un instituto, estudió Bellas Artes y Restauración. Su pasión por el arte asegura que viene desde pequeño "cuando empecé a dibujar cómics y tebeos". El interés por la talla le viene de familia, "mi abuelo era carpintero y nací viendo cómo trabajaba la madera" indica. A los 16 años se comenzó a interesar por la pintura y la poesía mientras decidía que se iba a dedicar a crear arte gráfico. Y a estudiar, crear, restaurar, conservar y cuidar el arte que se posa en sus manos.
Fuertes cuenta que sus mayores referentes artísticos son "los pintores asturianos como Evaristo Valle, Mariano Moré, Paulino Vicente o Nicanor Piñole, grandes amantes del paisaje de la región, pero también los acuarelistas del siglo XIX".
Hace años dibujaba al óleo pero ahora, como él mismo explica, "no dispongo de un estudio y mi espacio es más reducido por eso practico la técnica de la acuarela". El autor de la exposición no duda en aclarar que aunque hay una creencia extendida culturalmente de que la acuarela sirve para apuntes, "se equivocan porque una obra realizada con esta técnica puede ser muy compleja, solo hace falta fijarse en William Turner o Winslow Homer", señala.
La muestra reúne obras en las que los protagonistas son bodegones y paisajes, pero también copias de maestros, como una réplica de un cuadro de Evaristo Valle. "Me gusta más la pintura contemporánea porque trabajo con ella debido a mi profesión de restaurador". La muestra se puede visitar hasta el viernes 21 de agosto de lunes a viernes en horario de 12.00 horas a 13.30 y de 18.30 a 21.00 horas. Los sábados la exposición estará abierta solo por la mañana.
