Cuarenta años representando el folclore asturiano encima de los escenarios se dice rápido. Si además se le añade que la sección de coros y danzas del Grupo Covadonga tiene un protagonismo internacional fuera de España, los adjetivos para describir el 40º. aniversario se quedan cortos por parte de su directora, Marina Fernández Hinojal. Este grupo de danza gijonés que "aguanta" año tras año y evoluciona dentro de la tradición y el folclore de Asturias, no desiste en su empeño de ser uno de los grupos baile tradicional referente en la región. "Esfuerzo, sacrificio y entrenamiento así define es la definición de 40 años de en los que "se deja la piel" en cada actuación y en todos los ensayos.
Este pasado fin de semana el grupo de coros y danzas del Real Grupo Cultura Covadonga participó en el 65.º Desfile del Día de América en Asturias, la populosa cabalgata de las fiestas de San Mateo, en Oviedo, que el sábado vivió una de sus ediciones más populosas.
"Muchos de los que ensayan con nosotros cada semana tienen hijos, un trabajo o estudian carreras, el sacrificio de los miembros de este grupo es total, me siento muy orgullosa de todos ellos", explica la directora Marina Fernández, sucesora en esta tarea de Héctor Piñera, quien fuera su esposo y precursor de esta iniciativa en 1995.
El grupo se siente orgulloso de la evolución y los cambios que han sufrido a lo largo de estos años. Porque aunque la tradición, suene a viejo o estancado, estos calificativos no hacen justicia a este grupo de coros y danzas que se caracteriza por su evolución y búsqueda incansable dentro de la cultura de la región. "El folclore asturiano es sumamente rico, aunque estamos toda la vida ofreciendo bailes de épocas pasadas. Es una fuente inagotable de recursos", comenta la directora, quien añade que "estudiamos los bailes, la historia y todo lo que es el entorno de los mismos."
Muy acorde con el baile y el canto, son los trajes que utilizan en todas sus actuaciones. Sus vestuarios son originales de cada zona y cada época, como los de la zona de Oriente, de Leitariegos o trajes de marineras. "Tenemos mucha suerte de contar con todos estos trajes y modistas de la época que nos ayudan a conformarlos para que sean lo más fieles posibles a los de antaño", comenta Marina.
Recién cumplidas sus cuatro décadas, la agrupación celebraba hace unos días, tras las fiestas de la Santina en el Grupo, una espicha en la que conmemoran tantos años de trabajo, esfuerzo y recuerdos por medio mundo. También quieren recordar a los que ya no están pero siguen vinculados o los miembros veteranos de la agrupación como Elena Izurbe, María Jesús Piñeda o Estrella García Miranda, que llevan más de 25 años en esta sección grupista. "Esta fiesta ha sido una celebración para nosotros y para todos aquellos que tiran de toda la agrupación, tenemos que darles las gracias a todos ellos", comentó la directora emocionada.
La agrupación de coros y danzas no cierra sus puertas a nadie, sus miembros que ensayan en diferentes niveles (Escuela de baile tradicional, Escuela de perfeccionamiento y el Grupo folclórico), tienen edades comprendidas entre los 3 y los 68 años. María Jesús Piñeda, hija de la directora, ha estado unida al grupo su "otra" familia desde pequeña, "llevo desde los 3 o 4 años viniendo al grupo, me encanta bailar además hay muy buen rollo y la música de gaitas y castañuelas es tan alegre que lo pasamos genial", comenta orgullosa.
Este grupo asturiano que ya ha recorrido gran parte de Europa también ha tenido la oportunidad de dar el gran salto al otro lado del charco, con actuaciones en Miami y Santo Domingo. "Allí folclore asturiano les encanta, piensan que en España solo existen sevillanas, pero cuando llegamos pataleando y con nuestras castañuelas les dejamos alucinados", cuenta la directora Marina Fernández. Esta sección grupista que hunde sus raíces en el folclore asturiano demuestra día a día que tienen cuerda para rato o mejor, suela que gastar durante muchos años más.
