La Policía Nacional detuvo a un joven de 23 años de edad, vecino de Oviedo, por dejar a su hija de ocho meses de edad en el interior de un vehículo mientras hacía compras en un hipermercado de Porceyo, en Gijón. El padre intentó huir de los agentes por la puerta trasera de un bar y escondiéndose bajo una furgoneta.

Un agente fuera de servicio fue quien observó que la niña estaba sola y llorando, por lo que solicitó que los servicios de megafonía de la superficie comercial dieran aviso a sus familiares. Después de esperar más de quince minutos sin que se personara nadie, alertó a sus compañeros del 091 que procedieron a la apertura del coche y asistir a la niña.

Los hechos sucedieron a las 21.30 horas de ayer, cuando el policía fuera de servicio observó dentro del vehículo, en el aparcamiento del hipermercado, que la niña estaba dormida en su sillita y sola. Intentó esperar para ver si regresaban sus padres, pero la niña se despertó y se puso a llorar por lo que decidió dar aviso a los servicios de seguridad del centro comercial para que solicitasen la presencia de los propietarios del vehículo.

Sin embargo, transcurrían los minutos y seguían sin aparecer, por lo que una dotación de la Policía Nacional personada en el lugar procedió a la apertura del coche y a la asistencia de la niña que se encontraba en aparente estado de buena salud.

A las 22.30 horas se personó en el aparcamiento una mujer que dijo ser la abuela de la niña, quien manifestó que le había llamado su hijo porque había visto a la policía alrededor de su coche y no se había atrevido a acercarse. La abuela fue informada del traslado de la niña al hospital con carácter preventivo por lo que la mujer se dirigió de inmediato a ese lugar, junto con la madre de la niña que fue avisada telefónicamente.

Los agentes realizaron una búsqueda por el centro comercial y los establecimientos de las inmediaciones y localizaron a las 22.35 al padre de la niña cuando salía por la parte trasera de un bar. Al ver a los agentes, en lugar de detenerse y dar explicaciones sobre lo ocurrido, echó a correr por varias calles hasta esconderse debajo de una furgoneta. Finalmente los policías tuvieron que sacarlo de debajo del vehículo ya que se negaba a salir.

En el cacheo de seguridad se le encontró un ticket con compras realizadas a las 20.56 horas por lo que no pudo justificar la tardanza en recoger a su hija. El arrestado tenía antecedentes por resistencia y desobediencia.