Con el fallecimiento ayer, a los 87 años, de Jorge Burgaleta Ramos, se va una parte de la reciente historia industrial de Asturias: Fue el ingeniero que se encargó de levantar Uninsa, la factoría siderúrgica en Veriña que hoy forma parte de Arcelor y de poner en marcha hace cuatro décadas la primera ingeniería en Asturias que ofrecía proyectos llave en mano, Erpo, sistema de trabajo en el que fue precursora.

Nacido el 18 de agosto de 1928 en Madrid, donde cursó los estudios de Ingeniería de Minas, Jorge Burgaleta vino a Asturias en 1959 para incorporarse a la Fábrica de Mieres. De allí vino a Gijón como responsable de levantar el primer tren de laminación siderúrgico en Veriña, con la unión de la Fábrica de Mieres, Duro Felguera y la Sociedad Industrial Asturiana para crear la Unión Siderúrgica Asturiana (Uninsa), proyecto que él hizo realidad. Dejó Uninsa en 1972, poco antes de que ésta fuera absorbida por Ensidesa, empresa pública que Burgaleta rechazó en varias ocasiones dirigir.

El industrial vasco Alberto Erhardt lo fichó en 1973 para crear Erhardt Proyectos y Obras (Erpo). Una ingeniería que fue pionera en Asturias, al hacer proyectos llave en mano y dedicarse a subcontratar la ejecución de las obras, algo que le permitió abrir mercados en Latinoamérica y Estados Unidos. En 1990 se jubiló, después de que Erpo cambiara de manos.

Persona profundamente religiosa, se casó con Mercedes López de Haro Lavandera, fallecida en 2011 y con la que tuvo seis hijos. Su suegro era el naviero y consignatario José López de Haro, quien en los años 50 había presidido la junta de obras del Puerto. Burgaleta ejerció ese mismo cargo entre 1981 y 1983, mientras dirigía Erpo y donando los emolumentos que percibía como presidente portuario a organizaciones benéficas, recuerdan sus amigos.

Una de sus pasiones fue el golf, que practicó en el Club de Golf de Castiello, del que también fue presidente durante varios mandatos, bajo los cuales se duplicó el número de socios.

Sus restos mortales serán incinerados a las ocho y media de esta tarde en el tanatorio de Cabueñes y el funeral se celebrará mañana martes a la una, en la iglesia de San Julián de Somió.