Los dos ciudadanos de origen colombiano a los que la Policía Nacional "pilló" con medio kilo de cocaína de gran pureza valorado en más de 40.000 euros y que los ahora imputados escondían en un piso alquilado de El Llano aceptaron ayer en la sección octava de la Audiencia Provincial una condena de tres años y medio de cárcel y el pago de una multa de 40.097 euros. Los dos traficantes -un hombre y una mujer-, reconocieron ante el tribunal ser los responsables del delito contra la salud pública que se les imputaba después de que su abogado llegara a un acuerdo con la Fiscalía para rebajar la petición inicial de condena, que en un principio se elevaba hasta los cinco años de privación de libertad.

La Policía Nacional de Gijón aseguró en el momento del arresto de estos dos delincuentes a los que los agentes estuvieron siguiendo la pista durante más de tres meses, que los acusados vivían en un piso distinto al que tenían alquilado para guardar los estupefacientes. El objetivo era no levantar sospechas. El inmueble de El Llano en el que fue localizado el alijo -que estaba escondido dentro de una habitación protegida con un candado-, era utilizado como "punto de seguridad" en el que, además, se distribuía la droga entre los pequeños consumidores. Los estupefacientes requisados estaban envueltos, de hecho, en pequeños envoltorios preparados para su venta. El fiscal encargado del caso asegura que los dueños del piso que fue objeto de investigación no sabían de las actividades ilícitas que llevaban a cabo las dos personas a las que les habían alquilado el inmueble.

Los colombianos ahora condenados llevan en prisión desde que fueron puestos a disposición judicial poco después de su detención.