El Parque Tecnológico de Gijón afianza su posición como motor económico de la ciudad. Las 137 empresas que tienen sus base en estas instalaciones de Cabueñes y en las que trabajan más de 4.000 personas, facturaron el año pasado 1.609 millones de euros, casi 400 más que durante 2014. Esa posición de transformador económico de la ciudad le sirvió ayer al parque para recibir el premio Campanil 2016 que cada año entrega la Asociación de Antiguos Alumnos y Amigos del Real Instituto Jovellanos de Gijón. Una entidad que, además, quiso rendir un homenaje a uno de sus exestudiantes más ilustres, el empresario Enrique Pérez, "un hombre en el mejor sentido de la palabra", tal y como le definió durante el acto, utilizando versos de Antonio Machado, el director de LA NUEVA ESPAÑA de Gijón Francisco García.
"El proyecto del Parque Científico y Tecnológico tiene una gran capacidad para extenderse y un capital humano que hace que Gijón pase de ser una ciudad industrial a basarse en la investigación de la Milla del Conocimiento", afirmó durante la introducción del premio el Presidente del complejo de Cabueñes, el concejal Fernando Couto. El máximo responsable de la Asociación de Antiguos Alumnos, José Miguel Fernández, le dio el Premio Campanile al gerente del Parque Tecnológico, Rubén González, ayudado por los tres últimos alcaldes de la ciudad. Y es que la actual regidora, Carmen Moriyón, invitó a subir al escenario a entregar el galardón a Paz Fernández Felgueroso y a Vicente Álvarez Areces, responsables de los primeros pasos del Parque Tecnológico.
Pero si hubo un nombre propio en el acto ése fue el de Enrique Pérez. El fundador de la empresa Ingeniería y Realizaciones Eléctricas, presidente de los ingenieros técnicos industriales asturianos, al que se le llegaron a escapar las lágrimas en varios momentos durante el homenaje. Pérez, definido por Francisco García, que glosó su figura, como un hombre "bueno y justo", llamó durante su intervención a escuchar a Jovellanos y mejorar "las áreas de conocimiento" como camino para mejorar la situación de España.
