Este año no pudo ser, Gijón se queda a 202 escanciadores para batir el récord del año pasado, en la que se unieron 8.564 escanciados simultáneos.

Esta tarde, en la playa de Poniente se consiguió 8.363 botellas alzadas al mismo tiempo en el arenal.

Pese al flojo tirón inicial de la cita, condicionada por el mal tiempo y la lluvia intermitente en el día de hoy, gijoneses y visitantes se terminaron animando. El acceso al arenal gijonés se abrió un poco antes de las 18.30 horas, y, aunque costó, se generaron después las habituales colas. Tras un lento goteo inicial, la afluencia se fue intensificando y pasadas las 20.00 horas se superaron las 5.000 botellas repartidas. Y a las 20.30 horas se pasó de la cifra de los 7.000 asistentes hasta llegar a un máximo de 8.363 al poco de pasar las 21.00 horas, que era el límite horario establecido.

Con esa cifra Gijón supera el récord de 2013, pero no los de 2014 y 2015. El récord se podía haber superado si las miles de personas que estaban mirando tras el vallado se hubiesen sumado al escanciado simultáneo. Aún así, la cita no decepcionó y las miles de personas que accedieron al arenal terminaron abrazadas cantando el "Asturias patria querida" y el "Gijón del alma". Batir el récord ya queda para el Festival de la Sidra Natural de 2017.