El movimiento vecinal se ha dividido frente a los planes de ArcelorMittal para reformar las viejas baterías de coque de Gijón. El presidente de la Asociación de Vecinos de la zona urbana de Gijón (FAV), Adrián Arias, calificó ayer de "positivo" ese proyecto contra el que va a presentar alegaciones la Plataforma Contra la Contaminación en Gijón, reclamando al Principado que inste a Arcelor a construir unas baterías totalmente nuevas, en vez de reconstruir las viejas.
La FAV forma parte de la plataforma y además es el representante de esta federación vecinal quien ha redactado las alegaciones que la plataforma va a presentar contra el proyecto. No sólo eso, sino que la postura inicial de su representante en la reunión que mantuvo el martes pasado el equipo de coordinación de la plataforma para preparar las réplicas al proyecto de Arcelor era la de oponerse a que volviera a haber baterías de coque en Veriña, por el alto grado de contaminación que soporta la zona oeste del concejo. Al final de aquella reunión -en la que junto a representantes vecinales también había representantes de CC OO y de grupos ecologistas- se consensuó el contenido de la alegación, en la que se acepta que vuelva a producirse coque en la factoría de Veriña siempre que las baterías se hagan completamente nuevas.
Arias marcó ayer distancias con este planteamiento a nivel personal, dado que no será hasta principios de la próxima semana cuando se posicione formalmente la FAV tras una reunión de la junta ejecutiva que preside. Ahí también se decidirá el sentido de las alegaciones que la propia federación vecinal presentará al proyecto. El tema volverá a tratarse en la reunión de la junta directiva de la FAV (en la que están todas las entidades vecinales) del 5 de septiembre.
Adrián Arias atribuyó la postura de la Plataforma Contra la Contaminación al "desconocimiento" del proyecto de Arcelor "que prácticamente es una obra nueva, respetando la estructura de lo que había". El presidente vecinal va a promover una reunión de responsables de la multinacional con los portavoces vecinales, en la que también estén presentes los sindicatos.
"Una inversión de 134 millones de euros es una fuerte inversión, que no se hace en muchos lugares y consideramos que es muy positiva para Gijón, aunque debe asegurar que se cumplen escrupulosamente los criterios medioambientales con las mejoras", señala Arias, destacando la apuesta de la federación por el trabajo y la industria productiva en Gijón, a la par que por "el cumplimiento riguroso de la legislación medioambiental".
El presidente de la FAV sostiene que Arcelor "no va ha hacer un desembolso de 400 millones de euros" para construir unas baterías totalmente nuevas y respecto a quienes en el movimiento vecinal mantienen esa exigencia opinó que lo hacen desde el "desconocimiento" y por vivir en las zonas más afectadas por la contaminación industrial.
El responsable de medioambiente en la FAV, José Luis Rodríguez Peón, recordó que en la ordenanza municipal de medioambiente se asume que "la zona oeste es la más castigada por la contaminación y recoge que cualquier actividad industrial contaminante se mirará con lupa. Si se van a colocar unas baterías de coque, por lo menos que sean nuevas, porque esto ya está saturado. No sé si no para qué sirve la ordenanza".
Desde la Federación de Asociaciones de Vecinos de la Zona Rural de Gijón "Les Caseríes", su responsable del área de medioambiente, José Luis Aguirre, señaló ayer: "La zona ya está bastante jorobada por la contaminación. Que hagan las baterías nuevas y que tomen las medidas para que no contaminen. Nosotros estamos a favor de todas las empresas, pero no de que contaminen. No puede ser que por ahorrar Arcelor dinero, lo paguemos todos los ciudadanos, empezando por la gente que está enferma y luego todos los demás", agregando que las baterías de coque deben hacerse "en las mejores condiciones".
Las alegaciones de la Plataforma Contra la Contaminación frente al proyecto de baterías de ArcelorMittal (la mayor empresa de Gijón a la par que la más contaminante) también han provocado malestar en la sección sindical de CC OO en la multinacional siderúrgica. El área de medioambiente del sindicato es uno de los impulsores de la alegación para reclamar unas baterías nuevas. Además de los vecinos de Gijón, los trabajadores de la multinacional también se ven afectados por la polución que se origina en la factoría de Veriña y en mayor medida, al estar más cerca de los focos contaminantes. Fuentes del sindicato restaron ayer importancia a esto último, señalando que los trabajadores en sus puestos disponen de equipos de protección individual.
