Rosas u hormigas. Como buenos jardineros tendrán que actuar Mario Suárez del Fueyo y su grupo de concejales de la marca local de Podemos ante esta disyuntiva que se les plantea. Las opciones no están claras y las opiniones en el seno de Xixón Sí Puede son dispares. Unos, tras haber conocido de primera mano cómo ha funcionado el hormiguero en algo más de un año de mandato, están dispuestos a lanzarse a intentar fumigar a las hormigas del gobierno y acercarse a unas rosas que otros en el seno de la formación morada, en cambio, ven todavía demasiado espinosas. Estos últimos prefieren quedarse al margen y seguir dejando a la hormiga reina Moriyón el bastón de mando.
La situación no es fácil para los concejales podemistas. Hay malestar por las escasas propuestas que les ejecuta el gobierno local de Foro. En el grupo municipal se ha extendido la impresión de que las hormigas no son lo suficientemente laboriosas. "Son un muro de incompetencia", llegó a decir Suárez del Fueyo de los concejales foristas. Por eso ha cundido parcialmente la idea de que es necesario un cambio de rumbo en el Ayuntamiento, volver a intentar el acuerdo tripartito de izquierdas con IU y el PSOE. Una opción no exenta de escollos: en Xixón Sí Puede sigue habiendo bastante alergia a las rosas, hasta tal punto que todavía algunos concejales prefieren seguir permitiendo la invasión de hormigas.
Curiosamente, en el escenario municipal gijonés se viven paralelismos con la enredada situación nacional. Si bien, cambiando los actores protagonistas de algunos de los actos de un teatro político con desenlace incierto y con una hormiga reina, Carmen Moriyón, asistiendo a la obra desde el palco presidencial con cierta tranquilidad, confiada en que la falta de entendimiento entre socialistas y podemistas vuelva a dar al traste con el intento de acuerdo en el flanco izquierdo de la platea plenaria.
Buscando al antagonista. Como en toda obra política, el antagonista varía en función del bando que lo señale. Si a nivel nacional la izquierda apunta a Mariano Rajoy como "el malo" con el que no se puede negociar, en Xixón Sí Puede señalan a José María Pérez, líder local del PSOE. Hasta los que se muestran más proclives dentro del seno de la marca local de Podemos a tantear la posibilidad de una moción de censura todavía siguen expresando públicamente su rechazo a aupar a la alcaldía a Pérez. Quieren forzar otras posibilidades, pese a que el orden dictado por las urnas en las elecciones municipales situó al PSOE por delante de XSP. En base a ello, los socialistas reclaman encabezar la opción tripartita.
El hecho de que muchos podemistas gijoneses vean a Pérez como su Rajoy local es el principal obstáculo para una moción de censura. "El PSOE es en Asturias lo que el PP en Valencia", llegaron a decir en la última asamblea de Xixón Sí Puede. A Pérez, en concreto, le achacan su participación en el consejo de administración de El Musel en la época que está siendo investigada por los sobrecostes en la obra de ampliación portuaria. Desde el PSOE recuerdan, por su parte, que en el citado consejo hay muchas entidades representadas y que estaba Moriyón en el mismo cuando se liquidaron las cuentas portuarias puestas en entredicho en los juzgados. Con todo, hay que despejar la duda de si el día a día municipal ha servido o no para limar asperezas entre concejales socialistas y podemistas, algo a lo que apuntan desde el PSOE.
A ello hay que añadir rencillas del pasado. Por ejemplo, las de históricos sindicalistas que protagonizaron la lucha de Naval Gijón y que se han integrado en Podemos Xixón. Guardan mal recuerdo del PSOE y rechazan de pleno un acercamiento hacia ellos. Es el caso de Cándido González Carnero, quien, sin embargo, ya no participa en el Consejo Ciudadano del partido "por motivos personales". Si bien, mantiene "una colaboración intensa" con el mismo. Él es claro y cree que "no es el momento para una moción de censura".
División en la trama. Mucho se habla de las discrepancias dentro de Podemos ante la trama política nacional. También está ocurriendo en Xixón Sí Puede ante la trama política municipal. Y en ambos casos de trasfondo se sitúa, entre otras cosas, la relación que se debe marcar con el PSOE. Si Errejón e Iglesias disienten en Madrid sobre cómo se debe buscar una acuerdo con los socialistas para arrebatar el gobierno a Rajoy, en la sede municipal de XSP las diferencias versan directamente sobre si se debe intentar decididamente una negociación con el PSOE e IU para intentar arrebatar el gobierno a Moriyón.
Hay dudas sobre si la importante presencia de la fuerza podemista, con seis concejales, está teniendo el peso que le corresponde, dado el nivel de ejecución de sus propuestas que realiza Foro. Y también preocupa el hecho de que haya calado la idea de que ellos son el bastón de apoyo de Moriyón, algo a lo que apuntan insistentemente algunas fuerzas de la oposición -PSOE y PP, por ejemplo- y que desde XSP desmienten. Estas circunstancias provocan que algunos ediles, como el portavoz Mario Suárez, se inclinen por intentar un acuerdo tripartito donde tenga gran peso el programa podemista. Otros, en cambio, prefieren mantenerse en la oposición "con independencia".
A la espera del desenlace. El tiempo apremia a nivel nacional ante la amenaza de nuevas elecciones. Y a nivel municipal, aunque desde la izquierda quieren plantearse un balance del mandato forista "con calma", el tiempo también corre. "Estamos en una cuenta atrás, no vamos a andar jugando a ver si pactamos a un año de las próximas elecciones", recalcan desde el PSOE. Hay movimientos para intentar una moción de censura, pero el desenlace es más que incierto ante la dificultad de que socialistas y podemistas se pongan de acuerdo. En IU lo tienen más claro. "Como sigamos tres años más así, saldremos todos escaldados", afirman sin titubeos.
