La Escuela Politécnica de Ingeniería cerró el pasado viernes el plazo de matrícula para el nuevo curso, y las cifras que maneja el centro han dejado en evidencia un fenómeno derivado de la implantación de los "numerus clausus": la nota media de los estudiantes que acceden a la Escuela se ha disparado en varios de los grados, en algunos casos hasta más de dos puntos con respecto a las notas del nuevo alumnado del pasado curso.
Un cambio que, según señala el director de la Politécnica, Juan Carlos Campo, obedece a la limitación de plazas impuesta por la Universidad en todos los grados de Ingeniería de Gijón. "Se ve que los estudiantes se lo han tomado muy en serio, se han preparado a conciencia para poder acceder al grado que les interesaba y la consecuencia es que llegan con unas notas medias muy altas, mucho más que en años anteriores", indica.
Tecnologías Industriales es uno de los grados en los que más se ha notado el tirón en las notas de los nuevos alumnos, que llegan a las aulas de la EPI con una media "que se acerca más al nueve que al ocho", cuando en cursos pasados rondaba el seis. Mecánica y Telecomunicaciones son otros de los grados a los que llegan los alumnos mejor preparados, con notas medias más elevadas.
La medida de implantar un límite de acceso en los grados de Ingeniería fue adoptada por el anterior equipo rectoral, dirigido por Vicente Gotor, fruto de los informes de acreditación de la Agencia Nacional de Evaluación y para la Acreditación (ANECA), después de que algunos años se incorporaron a las aulas un número de alumnos superior al aconsejable, como consecuencia, sobre todo, de la asimilación de estudiantes procedentes de planes antiguos.
Este año aún se sigue notando esa asimilación, pero los números tienden a estabilizarse. Así, en el grado en Ingeniería Electrónica Industrial y Automática se han matriculado 97 alumnos; en Ingeniería Eléctrica, 47; en Ingeniería Química Industrial, 40 alumnos; en Ingeniería Informática en Tecnologías de la Información, 119; en Ingeniería en Tecnologías Industriales ha habido 118 matriculaciones; en Ingeniería en Tecnologías y Servicios de Telecomunicación, 93 matrículas, y en Ingeniería Mecánica, 177 nuevos alumnos. El mayor descenso se ha dado en Electrónica, con 49 alumnos menos, y en Mecánica, con una caída en el número de matrículas de 24 alumnos en total como consecuencia de las limitaciones de acceso a los grados.
Aún así, Mecánica, Informática y Tecnologías Industriales se consolidan como los dos grados con más presencia en la Escuela, en un año en el que, no obstante, se ha registrado un descenso en el número de alumnos de forma global. Una bajada que ya se viene contabilizando desde hace algunos cursos, toda vez que el año pasado ya se registraron 46 alumnos menos en la suma total de los diversos grados.
La subida de la nota media de quienes acceden este año a la Escuela supondrá además, a priori, un buen nivel de partida en la exigencia de resultados, en el camino hacia la excelencia que la Politécnica lleva tiempo trabajando en respuesta a las demandas de las empresas. A falta de los últimos cambios, para los que aún hay plazo en las próximas semanas, las clases en la Politécnica ya se desarrollan con normalidad desde mediados de septiembre.
