La necesidad de adecuar la normativa municipal a la realidad y la legislación actuales está en el origen de las nuevas ordenanzas de protección del medio ambiente atmosférico y publicidad exterior, a las que ayer dio luz verde la Junta de Gobierno de Foro Asturias. Los textos serán llevados ahora a las comisiones municipales para abrirlas al debate, y las enmiendas, de los grupos de la oposición.

En el caso de la ordenanza medioambiental se trata de poner al día una regulación que data de 2004 utilizando como base, al no existir una normativa específica del Principado, la legislación estatal. El texto incorpora como elementos sustanciales, en la descripción que ayer realizó el edil Fernando Couto como portavoz de la Junta de Gobierno: el desarrollo de la unidad de vigilancia ambiental de la Policía Local, la creación de un registro de incidencias, una mayor potenciación de la función inspectora con la "incorporación de un compromiso de inspección por parte del Ayuntamiento y un acta de inspección para ser aprobado por Decreto de Alcaldía", la fijación de un catálogo de derechos de la ciudadanía, la posibilidad de determinar zonas ambientales protegidas, el establecimiento de pautas de actuación ante molestias por olores, un esfuerzo en materia de información al público y la dedicación de un artículo específico al almacenamiento de graneles pulverulentos al aire libre.

Desde el gobierno forista, cuya área de Medio Ambiente lidera de manera directa Carmen Moriyón, se pone en valor el trabajo previo realizado para "lograr el mayor consenso posible". No sólo hubo un grupo de trabajo específico dentro del Ayuntamiento al margen del Consejo Sectorial de Medio Ambiente, también hubo un sistema de participación ciudadana a través de la web municipal y en el proceso de diseño del documento se tuvieron en cuenta propuestas específicas presentadas por la Federación Asturiana de Empresarios (FADE), la Plataforma Anticontaminación, la Federación de Vecinos de la Zona Rural y Xixón Sí Puede.

En el caso de la ordenanza de publicidad exterior se intenta sustituir un documento fechado en 1993 y, sobre todo, aglutinar en una sola normativa toda una serie de regulaciones que hasta ahora se incluían en el Plan General, el Catálogo Urbanístico o el plan especial del Muro. Además de facilitar la actividad a las empresas de un sector que no para de incorporar novedades técnicas a su trabajo. La nueva ordenanza regula todos los soportes publicitarios definiendo el régimen jurídico y sancionador a tener en cuenta en cada caso, afecta tanto a las publicidades temporales como permanentes y concreta las acciones en edificios municipales y mobiliario urbano a través de la concesión de uso.

El edil Fernando Couto destacó la prohibición expresa de los medios sonoros y de la denominada publicidad no controlable, como las pegatinas y octavillas. Al margen queda la publicidad en los taxis que se regulará por la ordenanza del sector.

Ambas ordenanzas fueron aprobadas fuera del orden del día de la Junta de Gobierno, que se limitó a desestimar un recurso y aprobar el convenio de 94.500 euros con Agicatur.