Una mujer de 58 años de edad y cuya identidad responde a las iniciales M. R. S. R. resultó herida de carácter grave alrededor de las dos y media de la tarde de ayer tras sufrir un atropello cuando cruzaba por la calle Ramón Areces, a pocos metros de la confluencia de esta vía con Severo Ochoa, en el barrio de Pumarín. Al parecer, y según relataron a la Policía Local de la ciudad los testigos de los hechos que se encontraban en un bar cercano, en el momento del siniestro la víctima estaba cruzando la calle por una zona no habilitada para peatones.
La mujer fue arrollada por un coche conducido por una mujer que ya ha testificado ante los funcionarios municipales. La conductora explicó que poco antes del atropello circulaba por la calle Severo Ochoa en dirección al centro comercial Costa Verde. Cuando se disponía a girar a la derecha para incorporarse a la calle Ramón Areces y así poder acceder a la avenida de la Constitución, la mujer comprobó que no venía nadie por la izquierda y continuó circulando, sin percatarse de la presencia de la viandante.
Hasta el lugar de los hechos se desplazaron varias patrullas de agentes de la Policía Local de Gijón. Los funcionarios serán ahora los encargados de elaborar un atestado en torno a lo sucedido que posteriormente será enviado al juzgado de guardia. Los sanitarios de emergencias médicas trasladaron a la mujer al Hospital Universitario Central de Asturias a bordo de una UVI Móvil. La gijonesa ingresó en el hospital ovetense con un traumatismo craneoencefálico grave.
Los vecinos de la zona aseguran que no es la primera vez que la imprudencia de un peatón provoca un accidente grave en estas calles, en las que además hay muchos cruces sin regulación semafórica.
