"El reto que tienen los destinos turísticos es no quedarse atrás, adaptarse al paso de la evolución tecnológica, y creernos más que el turismo es un pilar fundamental de la economía de nuestras ciudades". Josep Ivars Baidal, profesor de Análisis Geográfico Regional de la Universidad de Alicante, es uno de los responsables del proyecto "Destinos Turísticos Inteligentes: oportunidades de un nuevo modelo para la gestión turística", en el que Gijón y Taramundi son dos de los destinos piloto que se estudiarán durante los tres próximos años, y en el que participan otros núcleos urbanos y rurales de España. "El objetivo es ver cómo la transformación digital está afectando al sector del turismo. Las nuevas tecnologías requieren un cambio en la gestión de los destinos turísticos", indica Ivars.
En este proyecto participan las universidades de Oviedo, Alicante, Málaga y la Complutense de Madrid. Un estudio en el que se busca analizar los cambios en el mercado turístico y su nuevo escenario con la vertiginosa evolución tecnológica para encontrar un nuevo enfoque a escala local. "El concepto que defendemos parte de una adecuada gobernanza y no de la tecnología, es decir, de contar con una adecuada estrategia, que está compartida del sector publico y privado, que incluya la sostenibilidad del destino en su variante económica, cultural y medioambiental o también la accesibilidad para personas con minusvalía", resalta.
Los destinos turísticos inteligentes no se limitan solo a aquellos que utilizan tecnología de vanguardia, ya que el destino inteligente se define como un espacio innovador, sostenible y accesible. "La inteligencia de la gestión está en que busquemos cuáles son nuestras necesidades y adaptar la tecnología a ellas. Tenemos que tener los pies en el suelo y aplicar sentido común para que la tecnología no sea una carga", comenta Josep Ivars.
Este análisis tendrá una duración de tres años y pretende establecer un modelo operativo de destino turístico inteligente con una serie de recomendaciones para todos los actores vinculados al desarrollo turístico local. "Se busca ser un país realmente avanzado y competitivo. Y ofrecer un buen producto a nivel global, más allá de ceñirnos al paisaje en el interior o las costas en el litoral", resalta Josep Ivars, que ayer expuso el proyecto en Laboral.
