Un grupo de mujeres "muy inquietas por naturaleza" ha puesto en marcha una asociación sin ánimo de lucro, apolítica y aconfesional para "ser la voz de las personas a las que les privan de sus derechos, intereses legítimos, que les calumnian o pasan por situaciones injustas" provocadas por decisiones provenientes de instituciones públicas, privadas u otros colectivos. Episodios del día a día "que hacen daño y te obligan a pasar por situaciones injustas y de las que es difícil salir".
"Siempre está bien colaborar con la gente porque, aun con medios económicos para solventarlos, muchas veces no sabes salir de esa maraña de problemas y queremos ayudar a que puedan resolverlos", explica Margarita Cabana, presidenta de esta asociación a la que han convenido bautizar como "Mujeres por la transparencia".
"Pero no tenemos nada que ver con una asociación feminista, que ya hay muchas; nuestro cometido es la defensa de las personas y exigir que las instituciones cumplan las leyes y no se vulneren los derechos de los ciudadanos", matiza la tesorera de la entidad, Marián Hernández.
Por el momento está formada por una junta directiva compuesta por cuatro féminas pero con las puertas abiertas a más solicitudes de colaboración aunque "seremos muy rigurosas con la gente que aceptamos", advierten. Ante todo "no somos un grupo de mujeres aburridas" sólo conscientes de la indefensión que padecen muchos ciudadanos. "Es una defensa general ante casos opacos donde la transparencia no existe", incide Cabana. "Hay ciudadanos que no saben dónde acudir ni a quién contarles sus problemas y se preguntan ¿qué hago? Se quedan en el limbo y no se puede permitir", reprocha Hernández. No obstante, son conscientes de que les pueden llover críticas. "Nos vamos a meter en un avispero pero no nos importan los palos, sólo ayudar", resuelven.
El cometido de este colectivo pasa por una investigación exhaustivo de aquello que se les plantea para calibrar la veracidad de la acusación que reciben y siempre con precaución "porque hay gente que inventa mucho". Una vez consigan reunir pruebas contundentes que acrediten la versión comenzarán a buscar posibles soluciones de los agravios y así dar una solución a cada persona para que sea ésta quien interponga las medidas pertinentes. Todo ello combinado con una "difusión mediática" que presione a las "instituciones a hacer cumplir la ley" aunque conscientes de que "no será un acoso y derribo".
La presentación oficial de la entidad, que ya gestiona reclamaciones desde mayo, se celebrará este sábado en el Hotel La Palma de Llanes, a las doce horas, porque precisamente en Llanes "ya hemos comenzado a investigar casos que nos han comunicado", aunque su centro de operaciones estará asentado en Gijón. "A finales de julio se constituyó la asociación y digamos que primero vinieron los casos y luego la necesidad de movilización", sostienen antes de empezar a "limpiar lo que parece transparente pero es opaco".
