Feligreses de la Basílica del Sagrado Corazón de Jesús, popularmente conocida como la Iglesiona, han iniciado una campaña de recogida de firmas con la intención de recuperar para su parroquia, y de paso para el patrimonio gijonés, el sagrario y el popular Cristo de la Paz que llegaron a esa iglesia de la mano de donaciones populares. Dos piezas de gran interés que hace ya años miembros de la Compañía de Jesús trasladaron fuera de Asturias. No hubo éxito en los últimos intentos para que volvieran a Gijón y por ello un grupo de fieles ha decidido ponerse manos a la obra para reivindicar su devolución.

Los antecedentes de la historia tienen más de veinte años y se remontan al proceso de transferencia del templo de la Compañía de Jesús a la diócesis de Oviedo. El sagrario y el cristo salieron de Gijón camino de un almacén en Valladolid. Allí estuvieron unos años hasta ser reubicados en la iglesia de la Merced de Burgos. El sagrario, que reproduce el pórtico del templo, se realizó con plata y joyas donadas por los gijoneses. El Cristo de la Paz, o de Blay por el nombre del escultor que lo hizo, también fue una donación de un feligrés al templo gijonés.

La intención de los habituales de la Basílica es recoger firmas que avalen una petición de devolución para enviárselas al provincial de la Compañía de Jesús en España, Francisco José Ruiz Pérez S.J. Para ello se han habilitado puntos de recogida de firmas en los populares establecimientos Tritón (calle Menéndez Valdés), Meana (San Agustín), Viriato (Cabrales) y la farmacia Escalera (San Bernardo).