La dirección de la Empresa Municipal de Aguas -bajo la presidencia de la edil forista Ana Braña- ha incluido en su proyecto de presupuestos para 2017 una partida de 700.000 euros para hacer frente a posibles indemnizaciones a empresas por resoluciones de contratos. La estimación se hace con la mirada puesta en tres contratos concretos: el proyecto de saneamiento de Fano, Baldornón y Caldones, la obra de saneamiento de Vega (de menor envergadura) y el pozo de tormentas de Hermanos Castro.

La adjudicación de Fano, Baldornón y Caldones acaba de ser rescindida por decisión de la EMA tras haber pasado un año desde la formalización del contrato a la unión temporal de empresas formada por Seranco y Coinsa sin que hayan comenzado las obras. El contrato salió a licitación en 6,5 millones y se adjudicó en 3,3. Al ser la rescisión de hace unos días todavía no hay ningún movimiento oficial, pero desde la EMA ya se da por supuesto que la empresa querrá una compensación.

Como la ha querido FCC en el caso del pozo de tormentas de Hermanos Castro a la que ya se ha indemnizado con 152.000 euros pero pleitea en los tribunales por más dinero. Esa obra salió a licitación por casi ocho millones, se adjudicó con una baja del 36,5% y al empezar los trabajos la constructora dijo que la obra era irrealizable en ese coste ya que partía de datos erróneos del estudio geológico que se les dio desde el Ayuntamiento.

Esos 700.000 euros están dentro de los 26 millones de presupuesto corriente aprobado por el consejo de administración de la EMA para el año que viene. Inferior al del año anterior al eliminar los gastos de gestión de la depuradora del Este (3,3 millones). Al gasto corriente hay que sumar 8,4 millones en el capítulo de inversiones. Los presupuesto de esta empresa se presentaron ayer a los ediles del Ayuntamiento en la ronda de comparecencias del equipo de gobierno.