El alcalde, Ignacio Bertrand y Bertrand había presidido el pleno municipal. Poco duró el debate, unos minutos, porque cuenta el diario que simplemente se leyó un texto muy breve proponiendo aprobar el presupuesto municipal para el año 1967, "se leyó el texto y los concejales lo aprobaron por unanimidad". Ascendía a 141 millones de pesetas, al que se añadían 26 millones para urbanismo. Los concejales asistentes fueron dieciséis. No eran la totalidad pero suficientes para el quorum.