Los seis miembros de la red de venta de drogas, detenidos a finales del año 2013 se declararon en el día de ayer conformes con las penas pedidas por el ministerio fiscal, en un juicio que amenazaba con prolongarse en varias sesiones pero que ha quedado de este modo visto para sentencia.

La razón principal de esta aceptación de condena viene determinada por la rebaja de las penas solicitadas por la Fiscalía en casi la mitad a las requeridas en primera estancia. De este modo, la petición inicial de 22 años y 9 meses para el grueso del entramado se ve rebajada hasta los 13 años, 9 meses y un día, de la misma manera en que la multa económica disminuye de los más de 385.000 euros iniciales a casi 200.000.

El porqué de esta reducción de condena se ampara en la estimación por parte del ministerio público de los atenuantes de drogadicción que llevaba a los acusados a actuar movidos por la dependencia sufrida por estas sustancias.

Sí se mantiene la jerarquía de penas, siendo el cabecilla de la trama, conocido como "Torcecuellos", quien se enfrenta a una mayor condena, de 4 años de privación de libertad y un pago de 163.000 euros conmutable por otro año más de cárcel. En cuanto a gravedad de pena le siguen dos de sus colaboradores, con 3 años y 3 meses de cárcel y 3 años y un día respectivamente, mientras que los otros tres acusados rondan 1 año de pena de privación de libertad.

La trama, acusada de delitos contra la salud pública "en forma de sustancias que causan grave daño a la salud" y otros de igual nomenclatura pero "que no causan grave daño a la salud", finalizó sus actividades en los últimos meses de 2013 cuando las fuerzas de seguridad procedieron a la detención de sus miembros, incautándose de casi 300.000 gramos de cannabis y un kilo y medio de cocaína, además de otras drogas encontradas en los distintos domicilios.

Cuatro de los acusados ya cumplieron penas de privación de libertad tras su detención.