Los mercados gijoneses amanecieron ayer abarrotados de clientes que apuraban las últimas compras para confeccionar el menú de Nochevieja. En pescaderías, carnicerías, charcuterías y fruterías, los gijoneses se apelotonaban con los tiques del turno en la mano, mientras los vendedores no daban abasto en el Mercado del Sur.

"Los gijoneses somos mucho de comprar a última hora", explica Pedro Ángel, tras el mostrador de su pescadería. "Hay más apuro estos días que la semana anterior para la cena de Nochebuena y la comida de Navidad". Los productos estrella de estas fechas en las pescaderías son "mariscos y pescados nobles como el rubiel, el besugo o el rey", asevera la pescadera Carmen Domínguez mientras coge encargos de sus clientes. "Sí que se nota el aumento de los precios, como todos los años por estas fechas, pero hay algunos productos que están incluso más baratos que el año pasado".

Junto a los frutos de la mar, el gran protagonista de estas cenas es "el lechazo de Castilla, bien la paletilla, la pierna o las chuletinas", enfatiza Luis Monteserín, quien suma más de 20 años al frente de su carnicería. "Siempre suben un par de euros los precios, pero tenemos clientela muy fija que viene siempre a comprar aquí", explicita Monteserín, quien asegura que "hay quien sigue mirando al céntimo antes de comprar".

Pero el ingrediente que no puede faltar en ninguna de las mesas esta noche son las uvas de la suerte. "La gente sigue prefiriendo comprar la uva a granel, no empaquetada", subraya Ana Villa, quien mantiene los precios desde el último mes y en la mañana de ayer había vendido unos 30 kilos de este producto, indispensable para comenzar el año con la mejor suerte.

Entre los consumidores, división de opiniones. "Está todo carísimo", se queja Luis Díaz, "solo en la cena de Nochebuena, para seis personas, nos dejamos más o menos 300 euros". Sin embargo, en estas fechas, los gijoneses siempre se consienten algún capricho de más, en forma de algún que otro manjar sobre la mesa. Es el caso, de los productos ibéricos y los quesos del Principado, los aperitivos más demandados. "La gente procura darse algún homenaje en las navidades", señala Blanca Rodríguez en su establecimiento del Mercado del Sur, "pero siempre sin salirse de un presupuesto previamente marcado".

De este modo, los gijoneses apuran las horas para llenar la última cesta de la compra del año, la más cara, pero también la que más se disfruta. "A fin de cuentas, es un día más, lo importante es juntarse todos los seres queridos y pasar una buena velada", concluía Marta Díaz.