Una vez completado el trámite técnico llega el momento del debate político. El gobierno municipal de Foro ha anunciado a los integrantes de la comisión de Urbanismo en representación de los cinco partidos de la oposición en el Ayuntamiento -PSOE, Xixón Sí Puede, PP, IU y Ciudadanos- una doble sesión de trabajo los días 19 y 26 para debatir sobre el informe de alegaciones al documento de aprobación inicial del Plan General de Ordenación (PGO).
La Corporación reactiva así la acción política sobre una de las medidas municipales de más envergadura de las que tienen entre manos. No hay que olvidar que la concatenación de varias anulaciones judiciales de anteriores planes generales ha llevado al urbanismo gijonés a estar regido por el planeamiento de 1999. Uno de los retos del gobierno municipal de Foro para este año, y más en concreto para el edil Fernando Couto como responsable del área de Urbanismo, es avanzar en esa tramitación para conseguir llegar a la aprobación definitiva del documento. Una decisión a tomar en el Pleno previsiblemente en el primer trimestre de 2018.
La decisión que sí tomó el Pleno en febrero del año pasado, con el único rechazo de los ediles del PSOE, fue dar su aprobación inicial al nuevo Plan General. Ese documento se abrió a información pública y se recibieron, finalmente y tras un periodo de trabajo que terminó a finales de mayo, 1.499 alegaciones. El estudio del equipo redactor del Plan con sus estimaciones o desestimaciones se presentó al Ayuntamiento a finales de noviembre para su análisis. La última versión del informe completo se hizo llegar a todos los concejales sobre el día 20 del mes pasado.
El paso del informe de alegaciones por la comisión municipal no es un mero trámite. Ni mucho menos. Y es que los redactores del plan han optado por la fórmula de dejar pendientes de "decisión política" aquellas alegaciones que tienen que ver con los elementos más sensibles del documento urbanístico. Caso de los usos a dar al espacio de la fachada marítima de El Natahoyo que ahora ocupan astilleros e industria pesada. A ese ámbito hacen referencia muchas alegaciones y con planteamientos diametralmente opuestos. También tienen que ser los políticos quienes decidan sobre otros temas con aristas en el debate urbanísticos como los usos de suelos en Cabueñes, Nuevo Roces, el suelo que ocupara Mina La Camocha o el entorno de la Zona de Actividades Logísticas (Zalia).
Una vez esté finiquitada la tramitación, y con un nuevo documento sobre la mesa, la previsión es abrir un nuevo periodo de información pública para que los gijoneses puedan volver a tener la opción de analizar el texto y, si así lo estiman oportuno, volver a enmendarlo. Ese proceso de información pública se llevará una buena parte del calendario de este 2017 en el Plan General de Ordenación. Se entiende desde el gobierno municipal forista que un apoyo político mayoritario en el Pleno y un amplio proceso de participación de los ciudadanos garantizará un documento final que no tumben los tribunales.
