La iglesia de San Lorenzo de Gijón vivió ayer una mañana de ajetreo. Alrededor de las once y media se desvaneció frente al altar una feligresa que supuestamente había entrado unos minutos antes a rezar en el céntrico templo de la plaza de Los Campinos. Afortunadamente todo se quedó en un susto.

La mujer fue auxiliada en un primer momento por una médica que entró en la iglesia unos minutos después que ella. "La vio tirada a lo largo y corrió a ayudarla. El sacristán también salió a ver que pasaba. La chica tenía pulso pero no reaccionaba así que la médica intentó reanimarla", relató poco después del suceso el párroco de San Lorenzo, Herminio González. A pesar de que la mujer se encontraba inconsciente, la facultativa logró reanimarla y que caminara varios pasos por el templo hasta que llegaron al lugar de los hechos los sanitarios de emergencias médicas que se hicieron cargo de la situación y trasladaron a la víctima del suceso en ambulancia hasta un centro hospitalario.

"Era la primera vez que la veíamos. No sabemos quién es por lo que suponemos que había venido a rezar", explicó ayer el párroco, descartando que se tratase de una indigente que se había resguardado del frío dentro del templo, tal y como llegaron a apuntar algunos testigos. La mujer fue sometida a varias pruebas médicas para averiguar las causas de su desvanecimiento. La salida de la mujer en camilla desde el interior de la iglesia provocó la curiosidad de los viandantes que a esas horas del mediodía se encontraban en las inmediaciones del Paseo de Begoña.