El concejal de urbanismo del Ayuntamiento de Gijón, Fernando Couto, contrapuso ayer las críticas al metrotrén del PSOE de Gijón y Asturias con el respaldo que ha dado la presidenta andaluza, Susana Díaz, al metro de Málaga.

"Para los que califican de despilfarro el túnel de Gijón, recordar que costó 130 millones de euros que pagó el Ministerio de Fomento, frente a los 600 millones de Málaga, de los que 450 los puso la Junta de Andalucía y 150 el Ayuntamiento. Sobran más consideraciones", señaló el edil durante su intervención ayer en la Convención de Foro Asturias en Gijón, en la que fue el primer interviniente.

Couto fue más allá y tirando de hemeroteca leyó a los asistentes algunas de las frase que la prensa andaluza recogía de boca de la presidenta autonómica y una de las mujeres con más peso en el PSOE, Susana Díaz. La presidenta andaluza recalcó que la apertura del metro colocaba a "Málaga en el selecto club de ciudades" que lo tienen, destacaba que se trataba de "un servicio llamado a cambiar la articulación de la ciudad", además de calificarlo como "estratégico, transformador, eficiente, ecológico", entre otros adjetivos.

El concejal de urbanismo se apoyó en esa valoración de Susana Díaz para defender que el túnel del metrotrén -inoperativo desde su construcción y actualmente anegado- "es la infraestructura básica para mejorar en Gijón y en Asturias la continua pérdida de viajeros de cercanías".

Couto también reprochó al PSOE que considere que la centralidad en Gijón está en Moreda, mientras que en Oviedo y Langreo las estaciones ferroviarias "se construyeron en el centro de la ciudad".

Una comparación que llevó al concejal forista a rematar que "por eso, frente a la centralidad descentrada de algunos, aquí estamos en Foro para reafirmar que no vamos a renunciar a la centralidad, no vamos a renunciar a la intermodalidad, no vamos a renunciar al soterramiento de las vías y no vamos a renunciar al compromiso ministerial" para hacer realidad un proyecto que se echó a andar cuando Francisco Álvarez-Cascos era ministro de Fomento.

En opinión de Couto fueron los socialistas cuando entre 2004 y 2011 gobernaban en Gijón, en Asturias y en España quienes "se cargaron el proyecto del plan de vías y no hicieron nada más que colocar un apeadero provisional, un chamizo, en Sanz Crespo", provocando, según él, la pérdida de un millón de viajeros anuales al ferrocarril.