La Fiscalía de área de Gijón pide una pena individual de dos años de prisión para dos responsables de Astilleros Armón y otro de la empresa Fyro Grúas acusados de ser los presuntos responsables de un accidente laboral en el que murió en Gijón un trabajador de 50 años y que tuvo lugar el 28 de enero de 2015.

El accidente se produjo cuando el empleado, oficial de segunda instalador de la empresa Fuyro Grúas, encargada del mantenimiento de las grúas del astillero, procedía junto a uno de sus compañeros a sustituir los cables de una grúa que se habían desencajado de las poleas del carro. En un momento de la maniobra, el gancho que permanecía suspendido se precipitó desde una altura de quince metros, lo que provocó una fuerte sacudida de la grúa y que el carro golpease fuertemente la cabeza del trabajador, que falleció de forma prácticamente instantánea tal y como relata el representante del Ministerio Público en el escrito de conclusiones provisionales presentado ante el juzgado de instrucción encargado del caso.

Según la Fiscalía de Gijón, el accidente estuvo motivado por la falta de evaluación de los riesgos de la operación y de planificación de medidas preventivas, unas obligaciones que, según señala, competían a uno de los acusados, administrador de la empresa Fuyro Grúas.

Los otros dos acusados son el entonces responsable en materia de seguridad y riesgos laborales de Astilleros Armón y el técnico de prevención de riesgos laborales de la misma empresa y responsable de coordinación con las otras empresas que trabajan en el astillero. La Fiscalía considera que los hechos son constitutivos de constituyen un delito contra la vida y la salud de los trabajadores en concurso ideal con un delito de homicidio por imprudencia grave.

Además de la pena de prisión, el Ministerio Público pide que los acusados paguen sendas multas de 3.600 euros y de una indemnización conjunta de 120.000 euros a la pareja del fallecido y de 15.000 al padre.