Más de cuarenta millones de euros. Ésta es la cifra que el Ayuntamiento deberá desembolsar para que Gijón se convierta en una ciudad completamente accesible como estipula la ley a juzgar por el Estudio de Accesibilidad de los Edificios y Viales Públicos elaborado por "Ilunion Tecnología y Accesibilidad" -el grupo de empresas de la Fundación ONCE- en los distritos sur, este, oeste y El Llano y que esta semana presentó el gobierno local ante el Consejo de Discapacidad.

El estudio ha permitido evaluar y localizar las barreras de accesibilidad existentes en la ciudad como primer requisito para poder determinar el "Plan de Accesibilidad Integral y No Discriminación" que necesita el municipio y cuyo borrador ultima el ejecutivo local. Una serie de análisis detallados con el dictamen de "Ilunion" que desglosa una relación de actuaciones urgentes, necesarias y recomendadas junto a una estimación tanto de tiempo de ejecución, tres fases de un año cada una, como económico.

El texto presentado ante el Consejo de Discapacidad divide en dos actuaciones estas labores de adaptación de la ciudad. Por un lado el entorno urbano -con una dotación total de 20.942.971,63 euros-, que se refiere a las calles. La segunda parte de las actuaciones previstas repercuten en el entorno edificado -con un presupuesto de 11.979.619,39- que afecta a 160 edificios de uso y titularidad públicos distribuidos en edificios administrativos (17), docentes (84), sanitarios (22) y de pública concurrencia (37). Un análisis para el que "Ilunion" ha contado con la colaboración de la Confederación Española de Personas con Discapacidad Física y Orgánica de Asturias (COCEMFE).

Por zonas de actuación y según el informe aportado, al distrito este (que incluye La Arena, El Bibio, El Coto, Las Mestas, Ceares y Viesques) tiene presupuestados 9.755.545,68 euros. En el distrito oeste (Jove, La Calzada, El Natahoyo, Moreda y Tremañes) harían falta 10.042.867,51 euros. Al distrito de El Llano le corresponderían obras por valor de 3.946.414,96. Por último, acometer el total de adecuaciones en el distrito sur (El Polígono, Pumarín, Perchera-La Braña, Santa Bárbara, Roces, Montevil, Contrueces y Nuevo Roces) supondría un coste de 9.077.762,98 euros.

El coste total estipulado en estos cuatro distritos asciende a 32.822.591,02 euros, una cifra a la que hay que sumar el coste presupuestado, gracias a un informe previo similar, que se realizó para la zona centro y que se presupuestó en 8.463.756,40 euros. Por tanto, Gijón deberá costear los 41.286.347,42 euros que el Estudio de Accesibilidad de Edificio y Viales Públicos considera necesarios para la transformación total de Gijón en una ciudad con accesibilidad integral en favor de lograr una plena integración de todas las personas, con o sin discapacidades de cualquier tipo.

Los elementos a tener en cuenta para ejecutar todo este despliegue al que obliga la ley tienen en consideración, por ejemplo, el mobiliario urbano (aseos públicos, bancos, barandillas, buzones, cabinas, bolardos, contenedores, fuentes o jardineras, entre otros), elementos de urbanización como pavimentos, dimensiones de las aceras, pendientes, pasos de cebra, vados de vehículos o bordillos, accesos a playas (rampas o señalización), iluminación y transporte en referencia a bus urbano, taxis o plazas de aparcamiento reservado en superficie.

El estudio presentado por "Ilunion" ofrece además unos criterios de priorización para acometer las mejoras que, según está estipulado, se prolongarán durante tres años aunque no se empezaría de cero, pues el Ayuntamiento ha completado muchas de ellas. De esta forma, el primer requisito es la prioridad de uso, es decir, a tenor de la afluencia de usuarios. También el carácter de urgencia se tendrá en cuenta por lo que tendrán prioridad las situaciones de riesgo o peligro para alguna discapacidad o limitación. Otro factor a priorizar es la rentabilidad social, aquellas que beneficien a un mayor número de personas serán las primeras en realizase. El cuarto criterio es llevar a cabo una distribución equitativa en todos los distritos y también se conmina a una previsión y coordinación con otras actuaciones, es decir, aprovechar cualquier obra de renovación municipal para que se cumpla con los criterios de accesibilidad.

El propio informe programa la realización en tres etapas debido a "la dificultad económica de presupuestar en el Ayuntamiento todas las intervenciones a la vez y la lógica de abordar las obras de manera que se pueda realizar un control adecuado sin precisar grandes medidos de forma simultánea".

Ahora, tras la redacción de este documento, el Consejo de Discapacidad puede acelerar los pasos en la elaboración del Plan de Accesibilidad Integral y No Discriminación para convertir en realidad la pretensión de lograr que Gijón sea una ciudad pionera en cuanto a accesibilidad.