"La Unión Europea tiene una legislación que presenta unos valores límite con la contaminación muy claros que hay que respetar por el bien de los ciudadanos". Gunther Wollf, miembro de la Dirección de Medio Ambiente de la Comisión Europea se mostró ayer tajante con respecto al problema de la contaminación durante su visita a la jornada sobre economía circular organizadas por la Federación de Empresarios del Metal y Afines del Principado de Asturias (Femetal).

Gunther Wollf, consciente de que en varios puntos de Europa no se respetan los niveles de contaminación "sistemáticamente" -y Gijón es uno de esos casos como denuncian los grupos ecologistas- hizo hincapié en respetar los niveles marcados por la comisión europea porque supone "un grave riesgo para salud" y eso es algo que "no se puede tomar a la ligera". Más aún, teniendo en cuenta que los problemas medioambientales "son difíciles y costosos de remediar".

En esta jornada, en la que colaboraron el Instituto de Desarrollo Económico del Principado de Asturias (Idepa), CaixaBank y el Grupo Luvicar, se puso en valor la apuesta por la economía circular cuya nueva propuesta legislativa implica un cambio de mentalidad en la forma en que "producimos y consumimos", recetó Wolff.

La economía circular ya no sólo apuesta por el reciclaje aunque este sea un tema pendiente para la Unión Europea según recriminó Gunther Wolff. "Debemos aumentar el reciclaje, por ejemplo residuos municipales, hasta el 65% para el año 2030 y evitar el vertido limitándolo a un 10%", confía con las nuevas propuestas legislativas que desarrolla su comisión. "Es ambicioso pero también factibles porque hay municipios en Europa que lo consiguen", señaló no sin recriminar que España está al 33% mientras la media europea en el 44%. Desde la Comisión intentarán también combatir la obsolescencia programada, las técnicas de muchas empresas para reducir la duración de un producto para poder crear más negocio.

Este nuevo paso de la economía basada en el reciclaje supone "atacar no solo la fase final del producto si no empezar desde el diseño de los productos, fomentar el 'ecodiseño', hacer productos que duren más, que se puedan reparar y extender su vida útil", anunció. Esta previsión de actuación que aconseja el Plan Europeo de Economía Circular podría generar 170.000 empleos directos y "muchos más indirectos" lo que supone "un volumen muy importante", remató Wolff.