En dos días Gijón ha vivido tres incidentes relacionados con jabalíes y en diferentes barrios y parroquias de la ciudad como son la Providencia, Castiello de Bernueces y el propio distrito centro, en el entorno de la calle Roncal donde el domingo fue abatido por la Policía Local un ejemplar.

El último caso fue un conductor sufrió un accidente de tráfico ayer alrededor de las ocho y media de la tarde cuando circulaba por la carretera de la Providencia. Al parecer el hombre acabó chocando contra un contenedor de basura al esquivar un jabalí que cruzaba la calzada. Los hechos tuvieron lugar a la altura de la desviación de la playa de Estaño. En el siniestro no hubo que lamentar heridos. A pesar de todo hasta el lugar del siniestro se desplazaron varias patrullas de agentes de la Policía Local.

A este incidente, que afortunadamente se saldó sin heridos, hay que sumar el susto que se llevó una mujer que llevaba a su hija en coche de Castiello al centro de la ciudad. Pasadas las diez de la mañana la mujer se sorprendió al ver ante ella "un jabalí enorme" que iba por la carretera, justo en el cruce del Camino del Curullu. Rápidamente alertó de los hechos, "para evitar un accidente o que alguien saliese herido", explicó. Tras ponerse en contacto con la Guardia Civil, la Benemérita envió a un coche patrulla para peinar la zona que había descrito la alertante "que se llevó un gran susto". Después de varias vueltas por el entorno de Castiello los agentes no lograron encontrar nada.

A estos dos sucesos se suma un tercero ocurrido en la madrugada del domingo en pleno centro de la ciudad. Un jabalí que deambulaba por el centro de Gijón fue abatido por varios disparos de agentes de la Policía Local en el cruce entre la avenida Schulz y la calle Mieres, después de que una sereno alertase de lo sucedido y le siguiera en su coche para no perderlo de vista hasta que llegasen los agentes. El suido transitó por vías y perturbó la seguridad de los peatones, muchos de ellos, según los testigos, tuvieron que protegerse en los portales por las acometidas del jabalí cuando se vio amenazado.