Lo cierto es que había perdido por cero goles a dos en El Molinón, ante el Albacete. Lo contaba en LA NUEVA ESPAÑA Julio Puente, "la fiesta por el récord de Joaquín terminó en disgusto por la penosa impresión dada, el Sporting siempre fue inferior al Albacete". Y es que Joaquín batía el récord de partidos en Primera, 471 cumplía. Al final de aquella temporada 1991-1992, que ganaría el Barça, el Sporting quedó por encima de la mitad de la tabla, en octavo lugar.