Un revólver inutilizado con su munición, una escopeta de caza totalmente legal -el detenido tenía licencia para ella-, una granada "con aspecto de estar inutilizada" y tres detonadores, además de varios cartuchos para la escopeta, todo ello metido "dentro de una bolsa". Es el material del que agentes de la Policía se incautaron en el registro que llevaron a cabo, alrededor de las 18.30 horas del jueves, en la segunda planta de un edificio sito en el número 19 de la calle Pizarro, en La Calzada.

El material pertenecía a Gerardo M., un hombre de unos 60 años que habita en el piso. De hecho, fue su propia hija, la propietaria del inmueble y con la que "no tenía muy buena relación", quien, al entrar a limpiar en el piso, debido a que Gerardo sufría problemas respiratorios, encontró una caja de municiones y una pistola vieja, hecho que hizo saber a su marido. Fue él quien, advirtiendo que también había una granada, avisó a la Policía.

Hasta el lugar se desplazaron dos coches del cuerpo y, precisamente por la existencia de esa granada, acudieron técnicos especialistas en la desactivación de explosivos (Tedax), un despliegue que se llevó con absoluta discreción y que hizo que muchos de los vecinos, incluso aquellos que habitan en el mismo edificio, de cuatro plantas, con una vivienda por planta, ni siquiera lo advirtieran.

No obstante, técnicos de los Tedax se llevaron la granada para su análisis y el informe técnico correspondiente ya que, una vez encontrada su colección de armas, lo principal era conocer el origen de la granada y los detonadores, los elementos más discordantes.

Solo ante la negativa del hombre a explicar a los agentes el origen del material, especialmente los cables y la granada, los policías procedieron a detenerle.

El hombre, con problemas respiratorios y fatiga, no llegó a pasar la noche en dependencias policiales. Fue trasladado al hospital de Jove para someterse a una exploración médica.

El viernes por la mañana acudió a la Comisaría de El Natahoyo, donde se negó a declarar por lo que pasó, finalmente, a disposición judicial.