La Junta Mayor de Hermandades Penitenciales de Gijón denunció este fin de semana el robo de un puñal de plata ligado a la Virgen Dolorosa, imagen que se venera en la Iglesia de San Pedro. No es un hecho aislado, desde hace meses el párroco, Javier Gómez Cuesta, viene advirtiendo de la sustracción de carteras de los bolsos de las feligresas más devotas y de mayor edad por lo que sppesa la instalación de cámaras de seguridad en el interior del templo.

La presencia en San Pedro de la Virgen Dolorosa -que procesiona Miércoles y Viernes Santo- se justifica con la inminente celebración de la Semana Santa. Este sábado los penitentes acudieron a la iglesia para continuar con los preparativos de las procesiones y se percataron de la ausencia de este puñal de plata de ley del siglo XIX y de unos 40 centímetros de longitud. Además del valor histórico y artístico, "tiene un gran valor sentimental", asegura Ignacio Alvargonzález, presidente de la Junta Mayor de Hermandades Penitenciales de Gijón, que confía en que aparezca tras denunciar los hechos en Comisaría.

El puñal desaparecido -ya sustituido por uno similar-, la corona y el manto son las tres únicas piezas que se conservan de la imagen antigua de la Virgen Dolorosa, obra del escultor Francisco Elías, después de que la forma original quedase destruida durante la Guerra Civil. Estas piezas se salvaron gracias a que estaban guardadas en domicilios de devotos y no en el templo, también destruido. "Era muy común hace años que las familias custodiasen piezas en sus casas para cuidarlas", explica Gómez Cuesta, que valora ya la instalación de un sistema de vigilancia en toda la iglesia tras advertir que en ocasiones desaparecen bolsos y carteles de "las devotas de mayor edad cuando están rezando", señala.

Sí existen ya varias cámaras de vídeo que custodian la zona próxima a la sacristía, al altar principal ya la capilla del lateral derecho del templo. "La iglesia esta abierta muchas horas, como debe ser, y no veía claro instalarlas también a la entrada pero algo debemos hacer", reflexiona el párroco.