Mariano Marín, portavoz del Grupo Municipal Popular, considera llegado el momento de reflexionar sobre el futuro de la Empresa Municipal de la Vivienda (Emvisa). Para el PP su destino natural es incorporarse a la Fundación Municipal de Servicios Sociales ya que, en palabras de Marín, "la labor que realiza es claramente social contradiciendo los propios estatutos de la empresa que hablan de su dedicación al alquiler de bienes inmuebles".

Ahora mismo la actividad fundamental de Emvisa es tramitar las ayudas al alquiler, que mueven cerca de cuatro millones de euros y suman unos 4.500 beneficiarios. "La realidad es que su actividad es social y no tiene razón de ser que sea una isla de los Servicios Sociales. Lo mejor sería que todo estuviera en un sólo órgano. Eso sí, que funcione bien", dijo el edil.

Precisamente el proceso en marcha para modificar las bases de esas ayudas fueron motivo de crítica para el líder del PP gijonés. Marín no está a favor de las propuestas de cambio que presenta Foro y en las que, en algún caso, ve "un guiño a Xixón Sí Puede". El portavoz popular rechaza, fundamentalmente, que se eliminen los topes de tiempo en el derecho a recibir esas ayudas y que se obvien colectivos que puedan necesitar de este apoyo de su Ayuntamiento.

En el primer caso, el portavoz popular entiende que suprimir la exigencia de una duración máxima de la ayuda -ahora mismo oscila entre los dos y los cuatro años- sólo favorecerá que, por un lado, se cronifique la situación de muchas familias con esa dependencia de las ayudas sociales y, por otro, se pongan trabas a la incorporación de nuevos perceptores a esos programas de atención en materia de vivienda.

En cuanto a la ordenación de colectivos, Marín denuncia que se obvia, por ejemplo, a los pensionistas, las familias numerosas, las familias monoparentales.