Un hombre de 36 años resultó detenido por la Policía Nacional tras ser sorprendido entrando a robar en una vivienda deshabitada de Ceares el pasado jueves 13 de abril a las once de la noche. Una vecina, que escuchó el ruido de unos cristales rotos, alertó de su temor puesto que el sonido provenía de una vivienda próxima cuyo propietario había fallecido meses antes y que conservaba todos sus enseres y mobiliario.

A la llegada de los agentes, éstos comprobaron que la ventana del patio trasero de la vivienda en la planta baja estaba fracturada y que el autor podría encontrarse aún en el interior. En la inspección realizada se localizó al intruso oculto en el baño de la planta de arriba, escondido tras una cortina, evitando que pudiera cometer el robo.