El anuncio de que Gijón albergará el 3 de septiembre el "Día de las alas" de Red Bull -la loca competición de "artefactos voladores" que saltan al mar desde una rampa de seis metros- ha generado gran expectación. No en vano se trata de un evento que allá por donde va registra llenos absolutos en sus gradas, así como una gran demanda de equipos para su participación. De hecho, las previsiones hablan claro: se espera que por el Muelle pasen unos 30.000 asistentes.

"Para Gijón es muy importante traer eventos como éste. Hay pocos en el mundo y nos posicionan en el mapa de las grandes ciudades. Se ha hecho en lugares como Praga, Moscú, Estambul o San Francisco. Tiene una repercusión mundial, se emite en directo y hay detrás una gran campaña de publicidad", asegura Jesús Martínez Salvador, concejal de Festejos y Turismo. Desde Red Bull también explican por qué han elegido la opción de Gijón: "Representa a la perfección nuestro ADN por su carácter abierto, divertido y auténtico. La localización refleja a nivel internacional la esencia del norte de España, fácil de identificar. Además, después de ver la acogida que ha tenido el anuncio inicial, no tenemos duda de que los gijoneses y el resto de asturianos se volcarán con el evento".

El "Día de las alas" implicará un importante despliegue en el entorno del puerto deportivo. La rampa, que se elevará a seis metros sobre el nivel del mar, se situará entre la antigua rula y el dique de Lequerica. Precisamente en éste se habilitarán gradas para la asistencia de público, que también podrá ver el espectáculo desde el dique de la antigua rula y el de Talasoponiente, así como los otros salientes internos del Muelle. Habrá una pantalla gigante en los aledaños y la entrada es completamente gratuita. El aforo de las zonas de grada estará controlado, aunque la gente podrá salir y entrar libremente a lo largo de las cuatro horas de competición.

El torneo comenzará previsiblemente a las 12.30 horas, de manera coordinada con la tabla de mareas, puesto que la pleamar está prevista para las 15 horas. Dado el calado de las aguas del puerto es el momento idóneo para que los equipos se lancen al mar en sus artefactos. La zona de amerizaje está señalada con boyas en tramos de cinco metros para medir la distancia de vuelo. Asimismo, una boya especial marcará el récord mundial de 78 metros, conseguido en California.

Una gran fiesta en el Puerto Deportivo

Sin embargo, la fiesta comenzará mucho antes de las 12.30 horas. "El 'Día de las Alas' comenzará a las 10 de la mañana, cuando se abra el paddock en el que estarán colocados los artefactos voladores para que el público pueda verlos de cerca. La competición dará inicio a las 12.30 y durará en torno a las cuatro horas. Hay que tener en cuenta que serán 35 los equipos participantes, los cuales, además del propio salto, serán valorados por una actuación previa que harán antes sobre la rampa. Además, a lo largo del evento habrá varios paréntesis con sorpresas que iremos desvelando en las próximas semanas", explican desde Red Bull.

Cualquiera puede participar

La competición está abierta a cualquier grupo de amigos que quiera participar. El plazo de inscripción está abierto en www.redbulldiadelasalas.es. Los interesados dejan su dirección postal y reciben el pack de inscripción, que incluye un kit de montaje. Deberán diseñar, antes del 31 de mayo, un boceto "del artefacto más eficaz para el vuelo y, desde luego, el más molón que se les ocurra". En ese plazo tienen que remitírselo a Red Bull.

El 1 de junio se abrirá un periodo de votación on-line en el que el público elegirá cinco de los artefactos. Los otros treinta serán elegidos por la organización. El 13 de junio se hará pública la lista con todos los participantes. Sólo 35 podrán despegar desde la rampa de salto situada junto a la antigua rula.

Pero, aunque se deja espacio para la imaginación, no todo artefacto vale para la competición. "La competición comienza mucho antes de que los equipos se suban a la rampa. De hecho, fabricar un buen artefacto es clave y en ese proceso tendrán que demostrar todo su ingenio para, por un lado, ser originales en el diseño y, por otro, demostrar su talento para lograr que vuele lo máximo posible", indican desde la empresa que patrocina el evento. El torneo está sujeto a unas reglas.

Algunos consejos para los artefactos

"Lógicamente, por las características de la competición, será importante que los equipos elijan los elementos más propicios para la construcción. Por ejemplo, materiales más ligeros que el agua (como el plástico o la madera), en vez de otros como el metal. También es importante que incluyan algún elemento de flotación en sus diseños porque, invariablemente, todos los artefactos acabarán en el agua. Y, por esa misma razón, no está permitido el uso en su fabricación de ningún componente tóxico, que se disuelva en el agua, se pueda romper o sea difícil de retirar", explican desde Red Bull.

Por otro lado, hay algunas limitaciones. "Los artefactos no pueden tener un ancho de más de 8 metros, ni un largo superior a los 5. El peso del artefacto más el piloto no puede superar los 200 kg y la altura, con piloto incluido, debe ser de 3,5 metros como máximo. Además, todos los artefactos deben ser construidos desde cero y no deben tener ninguna asistencia motriz. A partir de ahí, los candidatos pueden ir tan lejos como su imaginación les lleve", señalan los organizadores, que recalcan que "la seguridad del evento es un aspecto esencial que se coordinará junto a las autoridades locales para garantizar que todo transcurra con normalidad".

Éstos son muchos de los detalles de una competición programada para septiembre pero que ya ha generado una gran expectación. Y, como aperitivo, aquí os dejamos un vídeo de algunos de los amerizajes más locos...