"Tu factura", "Ramón Factura" "Seguridad Banco Santander". Si a su empresa llega un correo electrónico con un reclamo tan simple como los anteriores, tenga cuidado porque que puede tener efectos devastadores. Las consultorías informáticas locales están alertando a sus clientes de la proliferación de correos electrónicos que contienen un virus de encriptación escondido en mensajes aparentemente inofensivos pero que ponen en riesgo la integridad de la información que maneje cada empresa. Un riesgo que los propios piratas se encargan de anular previo pago de una cantidad estipulada. De ahí que se pida a los empleados que extremen las precauciones y no abran ningún archivo cuyo remitente no identifiquen. Con unos mensajes muy similares a los detectados en Gijón, la semana pasada lograron perpetrar el secuestro informático de un Ayuntamiento en Lérida.

De las decenas de correos electrónicos detectados diariamente por las consultorías gijonesas destacan dos fórmulas empleadas por los piratas informáticos. La primera de ellas, lleva como asunto del correo "Seguridad Banco Santander" y en el cuerpo del mensaje se pide que "para verificar la actividad de la misma y omitir el proceso de baja, debe entrar en su cuenta haciendo click en el siguiente enlace". Bajo ningún concepto hay que pulsar sobre él.

Otra fórmula, más simple, hace referencia exclusivamente a "Su factura", en el asunto del correo. Esta modalidad contiene un archivo zip que al descargarlo libera un virus de encriptación que impide el acceso a cualquiera de los datos de todos los equipos conectados a esa misma red. En ambos casos, los hackers persiguen una extorsión económica para, a cambio, liberar la información secuestrada con su virus. Dicen los expertos que sólo con pasar el cursor por el remitente se puede ver que las direcciones no corresponden con cuentas oficiales.

Esta advertencia llegó tarde al Ayuntamiento del municipio catalán de Rialp, a 129 kilómetros de Lérida que estuvo seis días trabajando de forma analógica, sin internet. El jueves de la semana pasada un técnico municipal, encargado de gestionar los correos electrónicos, abrió el archivo "Factura Carmen" y en cuestión de segundos se activó un virus que encriptó todos los documentos de los ordenadores del consistorio, afectando especialmente en los formatos word, pdf y jpg. En su caso, los hackers advirtieron a través del virus que "la única manera de restaurar los archivos es pagarnos". O denunciar a la Policía, pero el daño puede ser grande.